La promesa de provisión
Dominical • Sermon • Submitted
0 ratings
· 61 viewsLa promesa de recibir provisión de Dios está ligada a la disponibilidad de dar.
Notes
Transcript
La promesa de provisión
La promesa de provisión
Filipenses 4:19 “Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.”
Introducción
Introducción
Este texto es usado ampliamente en la iglesia para reclamar las bendiciones materiales de Dios. Sin embargo, es importante considerar el contexto y comprender la razón por la que el apóstol Pablo la declara, pues esta promesa no es para todos.
Procuraremos entender como puedes alcanzar esta promesa de acuerdo a la enseñanza bíblica y no a la mala interpretación humana.
La iglesia de Filipo
La iglesia de Filipo
Pablo en su segundo viaje apostólico recibe la revelación de encaminarse a la región de Macedonia para predicar el evangelio (Hechos 16).
La primera ciudad fue Filipo, allí conoció a Lidia la vendedora de púrpura que abrió su casa para la predicación del evangelio.
También fue donde fue encarcelado por liberara a una muchacha de un demonio de adivinación. En la noche junto a Silas cantaban himnos al Señor cuando un terremoto los liberó de la cárcel, el carcelero y su familia aceptaron a Cristo.
Las convicciones de Pablo no permitieron desanimarse aun cuando sufrió esta injusticia, siguió predicando el evangelio en Filipo y Tesalónica, iglesias que se convirtieron en proveedoras para sus necesidades. 2 Corintios 11:9 “Y cuando estaba entre vosotros y tuve necesidad, a ninguno fui carga, pues lo que me faltaba, lo suplieron los hermanos que vinieron de Macedonia, y en todo me guardé y me guardaré de seros gravoso.”
La actitud de dar
La actitud de dar
El apóstol Pablo estando preso, suelta esta promesa a la iglesia de Filipo porque abundaba en ofrendas y dádivas:
Filipenses 4:14–18 "14 Sin embargo, bien hicisteis en participar conmigo en mi tribulación. 15 Y sabéis también vosotros, oh filipenses, que al principio de la predicación del evangelio, cuando partí de Macedonia, ninguna iglesia participó conmigo en razón de dar y recibir, sino vosotros solos; 16 pues aun a Tesalónica me enviasteis una y otra vez para mis necesidades. 17 No es que busque dádivas, sino que busco fruto que abunde en vuestra cuenta. 18 Pero todo lo he recibido, y tengo abundancia; estoy lleno, habiendo recibido de Epafrodito lo que enviasteis; olor fragante, sacrificio acepto, agradable a Dios.”
A pesar de que padecían necesidades materiales, los hermanos de la iglesia de Filipo amaban dar, no porque esperaban retribución, sino porque tenían amor por el apóstol y por la iglesia que sufrían necesidad.
2 Corintios 8:1–4 “1 Asimismo, hermanos, os hacemos saber la gracia de Dios que se ha dado a las iglesias de Macedonia; 2 que en grande prueba de tribulación, la abundancia de su gozo y su profunda pobreza abundaron en riquezas de su generosidad. 3 Pues doy testimonio de que con agrado han dado conforme a sus fuerzas, y aun más allá de sus fuerzas, 4 pidiéndonos con muchos ruegos que les concediésemos el privilegio de participar en este servicio para los santos.”
La iglesia de Filipos no esperaba que tocaran la puerta de su generosidad para dar, ellos mismo rogaban que les permitieran ofrendar para las necesidades de los santos, aun cuando ellos mismos sufrían carencias. (Éxodo 36, La reparación del templo con Joas 2 Reyes 12)
Esta actitud solamente la puede tener alguien que ha comprendido las verdades del reino de Dios, y que son corazón ha aprendido que es mejor dar que recibir (Hechos 20:35)
Los beneficios de dar
Los beneficios de dar
El apóstol Pablo revela dos promesas y beneficios para la iglesia:
Filipenses 4:17 “No es que busque dádivas, sino que busco fruto que abunde en vuestra cuenta.”
Aquí Pablo asegura que el más beneficiado es la iglesia, pues su generosidad es tomada en cuenta para aumentar las bendiciones sobre ellos. Filipenses 4:17 (NTV) “No digo esto esperando que me envíen una ofrenda. Más bien, quiero que ustedes reciban una recompensa por su bondad.”
Filipenses 4:19 “Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.”
Entonces cuando aprendemos a tener un corazón generoso, sin codicia ni ambición, entonces se aplicará a nuestra vida esta promesa gloriosa.
Conclusión
Conclusión
El tema del dar en la iglesia se ha vuelto polémico en los últimos tiempos, pues se han levantados falsos ministros que solo buscan las riquezas materiales, y abusan de estas promesas de Dios mal interpretándolas y usándolas a su antojo. Ciertamente estos hombres recibirán la justicia de Dios.
Pero esto no anula las promesas de Dios cuando nosotros aprendemos a ser generosos y colaboramos con el hermano o el prójimo que está necesitado, cuando damos para la obra de Dios.
La actitud con la que debemos dar es con amor, anhelando suplir las necesidades de la iglesia y del que sufre, no con una actitud codiciosa esperando que Dios nos colme de riquezas.
2 Corintios 9.7 “Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre.”
El texto promete suplir lo que nos Falta, no lo que no nos falta. Demos con alegría y desinteresadamente, estemos contentos y agradecidos con lo que tenemos, pues es más de lo que merecemos. 1 Timoteo 6:7-8 “porque nada hemos traído a este mundo, y sin duda nada podremos sacar.Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto.” ( Salmo 73:2)