Los escogidos de Dios
Evangelio- Poder de Dios • Sermon • Submitted
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Introducción: ¿quién no se ha preguntado porque a veces cosas malas le pasan a gente buena? qué tal cuando te quedas sin dinero, o alguien de la familia se enferma y has estado viniendo a la iglesia, ofrendado, apoyando a otros, no preguntas ¿ahora qué hice mal Señor? o ¿Por qué a mi Señor si yo me porto bien? ¿en algún momento te has preguntado porqué Dios no salva a todos de una vez? ¿Le ha fallado algo a Dios que algunos que son amables y ayudan no van al cielo? Estas y miles preguntas vienen o vendrán a nosotros, pero necesitamos responderlas con la Escritura y no divagar en nuestra pensamiento limitado y atrofiado por el mal, y no centrado en Dios.
Oración. Padre en esta mañana queremos que tu nos expongas a tu Palabra para que conociendo tu carácter podamos venir al arrepentimiento y al mismo tiempo a la fe, queremos que tu nos hagas creer en Ti y en Tú Palabra esta mañana.
Mis hermanos, acabamos de hablar de temas esenciales para entender la esperanza y seguridad de la fe cristiana. Ahora estamos a punto de ver los capítulos del 9-11 para algunos puede parecerles un punto central dentro de la carta para otros les puede parecer un paréntesis o una explicación previa a entrar a la parte práctica de la fe cristiana. Para entender mejor lo que Pablo quiere trasmitir debemos comenzar por observar que siente Pablo.
1 Se duelen por los que reniegan de Cristo.
1 Se duelen por los que reniegan de Cristo.
Verdad digo en Cristo, no miento, y mi conciencia me da testimonio en el Espíritu Santo,
que tengo gran tristeza y continuo dolor en mi corazón.
Porque deseara yo mismo ser anatema, separado de Cristo, por amor a mis hermanos, los que son mis parientes según la carne;
que son israelitas, de los cuales son la adopción, la gloria, el pacto, la promulgación de la ley, el culto y las promesas;
de quienes son los patriarcas, y de los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén.
¿qué vemos aquí? Nos identificamos con Pablo. Pues parece que esta parte de la Escritura no tiene que ver con nosotros porque no somos judíos dirían algunos, o tal vez aplican, la de, esto es un tema del antiguo testamento y no tiene relevancia para nosotros. Pero es obvio que tiene que ver con nosotros y nuestra fe. ¿quién es nuestro Dios? es una pregunta que se debe responder en esta sección.
Aparte de que es un gran recordatorio de que el apóstol, aunque siempre fue lógico en sus escritos, nunca fue frío en cuanto a sus sentimientos. Él sintió el “continuo dolor” de saber que su pueblo había rechazado a su Salvador, y en lugar de tratar de ignorarlo o de alterar su doctrina para negarlo, vivía con el peso de esa realidad.
Algunos judíos veían a Pablo como un Anatema- y realmente quisiera serlo, quisiera dar todo para que los de su sangre, nación, puedan alcanzar la Salvación. Anatema: Maldito (estar puesto bajo maldición divina), persona o cosa, que es excomulgado,
La disposición de Pablo a hacer esto a favor de su pueblo (Ro. 9:3) es un caso supremo de su dedicación al evangelio y a su raza. KITTEL, GERHARD ; FRIEDRICH, GERHARD ; BROMILEY, GEOFFREY W.: Compendio del diccionario teológico del Nuevo Testamento.
Es decir: Pablo había probado la Salvación, Pablo reconocía quién era el Salvador, Pablo había encontrado lo que tanto habían esperado. Pablo ama a su nación, ama a su gente, y el quisiera que todos ellos se salvarán. Pensaba: Ojalá este Antama que ustedes dicen, fuera realmente Anatema para que ustedes lo cocieran.
¿cuántos de nosotros vivimos con un pesar en nuestro corazón por los perdidos? ¿si a la iglesia se le dio la autoridad de predicar el Evangelio, no debería preocuparnos el no estar testificando del Evangelio? La encomienda de Dios es que prediquemos no que oremos para que se salven. Pero la oración, no es solo para que escuchen, sino para que nosotros hablemos. Efesios 6.18-20 “orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos; y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio, por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar.”
¿Qué pasó con los judíos si ellos disfrutaron de los privilegios de los tiempos antiguos y aun en este tiempo?
En un sentido, el rechazo de Cristo por parte de los judíos es casi inexplicablemente sorprendente por los beneficios que habían disfrutado (v 4-5), recibieron todos esos beneficios que debieron haberles preparado y apuntado hacia Cristo.
“La adopción como hijos” se refiere a Éxodo 4:22 y otros lugares en los que Israel es llamado el “hijo” de Dios. Esto debió haber preparado a Israel para la enseñanza de Jesús de que, por medio de Él, nos podemos acercar a Dios con términos íntimos como “Abba” (Mr 14:36).
“La gloria divina” se refiere a la nube visible de la gloria de Dios —llamada la shekinah— la manifestación de Su presencia morando en medio de ellos en el tabernáculo y en el templo (Éx 29:42-45; 1R 8:10-11). Jesús es una mayor manifestación de la presencia de Dios: “Y el Verbo se hizo hombre y habitó entre nosotros. Y hemos contemplado Su gloria” (Jn 1:14).
“Los pactos” se refieren a que Dios estableció una relación con el pueblo por medio de Abraham (Gn 15), de Moisés (Éx 24:8) y de David (2S 23:5). En cada caso, Dios inicia una relación con ellos y promete bendecirlos. En todos los casos, sin embargo, Él les habla de un Mesías o una figura futura que vendría a cumplir con el acuerdo (ver Gn 12:1-3; Dt 18:18; 2S 7:12-13).
“La ley” se refiere a que Dios le dio los Diez Mandamientos y toda la ley a Israel por medio de una revelación (Dt 4:8). Pablo nos dijo en Romanos 2 que si entendemos verdaderamente la ley, nos daremos cuenta de que no podemos ganarnos la salvación, y buscaremos a Dios para la salvación.
“La adoración en el templo” era una orden visible de servicio. Hebreos 9:1-5 la describe bien. Explicaba cómo el pueblo podía acercarse a Dios. Tenía que haber un sacrificio de sangre, un lavamiento y una preparación para la purificación, y un sacerdote que entrara en tu lugar. Todos estos rituales que Dios había establecido mostraban que no nos podíamos acercar a Dios en la forma en que quisiéramos; necesitábamos sangre para expiar el pecado y un sacerdote que se acercara en nuestro lugar. Jesús es nuestro sacrificio, nuestro sacerdote, nuestra pureza, nuestro pan. (Heb 8:1-6).
“Las promesas” se refieren a las numerosas profecías y promesas del Antiguo Testamento acerca de la venida de un Mesías. (Ver Gn 3:14-19; 49:10; Sal 2:2-7; 16:9-10; 22; Is 7:14; 9:6-7; 52:13-15; Miq 5:2).
Es probable que “los patriarcas” no solo abarque a Abraham, a Isaac y a Jacob, sino también a hombres como José, Moisés, Josué, Samuel y David. Ahora bien, todas las naciones tienen grandes líderes, pero parece que Pablo está indicando que Dios le habló a Israel por medio de estos hombres. Prácticamente todos ellos predijeron y prefiguraron la venida del Mesías.
“De ellos, según la naturaleza humana, nació Cristo”. Esto es obvio, pero muchas veces se pasa por alto. Jesús era judío. Para que el Hijo de Dios se hiciera hombre, tenía que ser parte de una raza y de una cultura. Al hacerse judío, Dios no solo le estaba dando un gran honor a los judíos, sino que estaba haciendo que para ellos, más que para cualquier otra persona, fuera “más fácil” relacionarse con el Hijo de Dios.
Podemos sentirnos tentados a mirar en otra dirección que no sea Cristo
¿quién tiene más de 5 años de leer la Biblia? ¿quién tiene más de 10 años de ser cristiano? - Si yo te preguntara ¿por qué dices que eres hijo de Dios? y me dijeras: pues porque, yo antes era bien malo, y ahora ayudo y me porto bien (puede ser una evidencia pero no la forma en que somos salvos), creo que no estás entendiendo aun el Evangelio,
es que desde pequeño me llevaban a la iglesia, leía la biblia, déjame decirte eso no salva, Pero no te desanimes, todo eso apunta a alguien, Cristo, Él es el único que salva.
Si te das cuenta en el Rom. 9.5 termina diciendo qué Cristo fue Israelita, quién Jesús es Dios sobre todas las cosas, bendito- y puedes encerrar eso, porque no dice, bendito el ser llamado judío, bendita la obediencia, benditos los 1000 capítulos que me sé, aunque son buenos, y son necesarios, pero no salvan, el Unico que Salva es Jesús quien es DIOS, bendito por los siglos de los siglos. ¿QUIÉN TE SALVA? Cristo ¿QUÉ TE SALVA? La fe en Cristo.
Ahora pasemos al siguiente punto sobre
2 Son afirmados por Su Palabra.
2 Son afirmados por Su Palabra.
No que la palabra de Dios haya fallado; porque no todos los que descienden de Israel son israelitas,
ni por ser descendientes de Abraham, son todos hijos; sino: En Isaac te será llamada descendencia.
Esto es: No los que son hijos según la carne son los hijos de Dios, sino que los que son hijos según la promesa son contados como descendientes.
Porque la palabra de la promesa es esta: Por este tiempo vendré, y Sara tendrá un hijo.
Y no sólo esto, sino también cuando Rebeca concibió de uno, de Isaac nuestro padre
(pues no habían aún nacido, ni habían hecho aún ni bien ni mal, para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese, no por las obras sino por el que llama),
se le dijo: El mayor servirá al menor.
Como está escrito: A Jacob amé, mas a Esaú aborrecí.
Continuando con la idea de Pablo, el tiene un pensar en su corazón, el está triste, porque algunos no han entendido que la elección de Dios no es conforme a la nuestra.
No es que Dios se invente un plan B porque el plan A se veía que no iba a funcionar. Dios no ha quitado a los judío y entonces puso la iglesia, La iglesia siempre fue su plan, aquí nos podemos reunir judíos o no, los que han leído la biblia y los que aun no la leen, esto que tu y yo estamos viviendo es el plan eterno de Dios. AHORA DÉJAME EXPLICARTE POR QUÉ
Pablo prosigue con el tema de los judíos, pero de los verdaderos judíos, y son aquellos que han creído la promesa en Su Palabra. Alguno tal vez le diría a Pablo, ¿haber lo que tu dices es que algunos de nosotros no somos judíos? ¿Entonces la Palabra de Dios falló?. Y Pablo les responde, en ninguna manera.
¿por qué los judíos no han reconocido al Rey que tantas veces fue prometido y que tanto esperaban? Lo primero que Pablo hace es descartar una respuesta—“... no digamos que la Palabra de Dios ha fracasado” (Ro 9:6). Dios le había dado a Israel estas promesas y pactos por medio de los “patriarcas” y de los profetas; por ejemplo, Dios le dijo a Abraham que bendeciría a sus “descendientes” (Gn 12:1-3). Pero Pablo hace una distinción muy importante y radical. “No todos los que descienden de Israel son Israel” (Ro 9:6). En otras palabras, él está diciendo: ¡Tenemos que definir correctamente a “Israel”! Algunos de los que descienden físicamente de Abraham, Isaac y Jacob no son parte del verdadero Israel, y otros que no descienden físicamente de ellos sí lo son (Pablo ya ha dicho esto antes, en Rom 4:11-12, 16).
Por ello cita las Escrituras, y comienza con Abraham, ¿en qué libro se encuentra la historia de Abraham? - Génesis -. Muy bien, antes de la Ley de Moisés, Antes de que fuera la nación de Israel. ahora ¿alguien recuerda quién era Abraham?
En resumen, era un hombre grande de edad, para que veas que Dios usa a cualquier persona, no importa su edad.
Era un hombre viejo que su primer hijo lo tuvo con la esclava Agar, por consejo de Sara y por su cultura equivocada. Aunque Sara era la receptora de ese privilegio, ella mamá quién sería el parte-aguas para formar una nación. Pero ella le dijo a Abraham toma a la esclava, a la mejor la palabra de Jehová falló. ¿Según la cultura de ese tiempo, no le corresponden los derechos, obligaciones y posesiones de la familia al primogénito? Por eso Agar - egipcia miraba con desprecio a Sarai (antes de ser llamada Sara). Génesis 16.1-16.
Pero bueno no podemos quedarnos ahí, porque habría mucho que enseñar sobre la circuncisión que era una señal de pacto, Isacc nace hasta el Gén. 21.1-7 Aunque Agar era una burlona, y menospreciaba a Sara. Abraham iba dejar morir a Isamel, ¿qué culpa tenía? quiero que mires bien esto, aunque Abraham había hecho cosas buenas y malas, esta era muy mala, ¿merecía Abraham recibir lo que se prometió? -NO
SOLO EN Isacc TE SERÁ LLAMADA DESCENDENCIA, Y se casó con Rebeca, igual una mamá mencionada aquí, pero una mamá con favoritismos, pero Dios antes de que Rebeca concibiera, ya había dado una promesa Dios. No le corresponde al mayor, los designios de Dios son diferentes a los nuestros. No Esaú cuidaba de la familia, no llegó cansado, ¿no lo quería porque estaba peludo? No es a nuestro parecer, ni uno, ni otro merecían la misericordia de Dios.
En primer lugar, la decisión que Dios tomó de bendecir a Jacob y no a Esaú se hizo desde antes de su nacimiento, “antes de que los mellizos nacieran” (v 11).
En segundo lugar, esa decisión no la tomó basándose en lo que Él sabía acerca de cómo resultarían los dos muchachos. La decisión se tomó “antes de que los mellizos… hicieran algo bueno o malo”. Algunas personas argumentan que Dios simplemente “sabe de antemano” quién lo va a aceptar y quién lo va a rechazar, pero el versículo 12 refuerza el argumento diciendo que la bendición viene “no en base a las obras sino al llamado de Dios”.
En tercer lugar, y considerando los primeros dos aspectos de la respuesta, la única diferencia entre Esaú y Jacob fue “el propósito de la elección divina” (v 11). La palabra griega para elección es ekloge, que quiere decir extraer, o escoger.
Para no quedarse corto, en el versículo 13 Pablo parafrasea las palabras que Dios dio por medio del profeta Malaquías (Mal 1:2-3): “... amé a Jacob pero aborrecí a Esaú”. Tenemos que tener cuidado de no pensar que este odio es idéntico a la emoción que usualmente llamamos por ese nombre. Hay un modismo hebreo detrás de esto. Jesús le dijo a Sus discípulos que ellos tenían que “odiar” a sus familias para seguirlo a Él (Lc 14:26). Eso no quiere decir que tenemos que odiar literalmente a nuestros padres, sino que debemos amar a Jesús más que a ellos. No obstante, Pablo está diciendo que Dios eligió poner a Jacob por encima de Esaú, pero no por nada que hubiera en Jacob que fuera moralmente superior a Esaú.
La única razón por la cual Jacob recibió la promesa se debió a la elección misericordiosa de Dios. Esta enseñanza es fácil de entender, pero difícil de aceptar. Por siglos la respuesta de Pablo le ha dado problemas a la gente. Es por esta razón que muchas veces se brincan Romanos 9 – 11.
Es la Palabra misma nos afirma la elección de Dios, es decir, toda la Escritura siempre nos ha apuntado a Cristo, y cuando lees la Escritura no solo entiendes que hay reglas, historias, bendiciones y profecías, sino que todas esas cosas nos apuntan a Jesucristo el Salvador. En quien Dios está mostrando su misericordia.
Es su misericordia y nada más. No es por capacidades, o talentos, no es por fuerza, por edad o por alguna trampa, es por su misericordia, nadie merece tal salvación, pero Dios la ha dado en Cristo, si crees en Cristo solamente, serás salvo.
¿cuándo piensas en tu salvación ves el carácter de Dios o tus capacidades? ¿Crees en Cristo y su obra en la cruz? ¿Ves la salvación como un acto de misericordia de Dios? (No la merezco, soy indigno, aun todas mis capacidades o mi buen comportamiento no me salvan) ¿Te sometes a su señorío?
3 Son receptores de Su Misericordia.
3 Son receptores de Su Misericordia.
¿Qué, pues, diremos? ¿Que hay injusticia en Dios? En ninguna manera.
Pues a Moisés dice: Tendré misericordia del que yo tenga misericordia, y me compadeceré del que yo me compadezca.
Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia.
Porque la Escritura dice a Faraón: Para esto mismo te he levantado, para mostrar en ti mi poder, y para que mi nombre sea anunciado por toda la tierra.
De manera que de quien quiere, tiene misericordia, y al que quiere endurecer, endurece.
¡El comienzo de Romanos 9:14 sugiere que Pablo ha dado esta enseñanza antes! Él acaba de afirmar que cuando las personas no creen es porque Dios no las ha escogido. Luego dice inmediatamente: “¿Qué concluiremos? ¿Acaso es Dios injusto?”. Por supuesto, ¡hace esa pregunta porque sabe que sería la primera reacción de cualquiera que escuche esta enseñanza! Es normal pensar y preguntar: Escoger solo a algunos y no a todos… ¡no es justo! ¿No está siendo Dios injusto? Pero Pablo argumenta en contra, diciendo: “¡De ninguna manera!”.
Tenemos que dar una respuesta a las preguntas difíciles. Es necesario, pues, aceptar esto diciendo que nada existe en nuestra voluntad o en nuestro esfuerzo, (el Apóstol ha escrito la palabra correr: por cuidado, diligencia o esfuerzo) para que nos contemos entre el número de los elegidos, pues todo procede totalmente de la bondad de Dios, la cual, por sí misma, nos hace suyos sin necesidad de nuestros esfuerzos y aun sin pensarlo.3
. por ejemplo:
¿por qué Dios permitió los tiroteos del 4 de Julio en EUA Illinois? ¿por qué murieron sin escuchar el Evangelio los mayas, aztecas, zapotecas, olmecas? ¿porque mi familiar no fue al cielo si fue una buena persona? La preguntas más crudas para el cristianismo son estas porque aun los mismos cristianos hemos experimentado cosas similares. Pero he aquí la respuesta de Dios para nosotros.
¿quienes son a los que verdaderamente Dios acepta? ¿Dios no hace acepción de personas? ¿Dios es injusto? ¿Dios no es tan justo entonces? Si las respuestas las buscamos desde nuestro propio pensamiento seguramente hallaremos aspectos muy contradictorios, pero por ello Dios nos ha dejado su Palabra, para que nosotros conozcamos cuál es el corazón del Señor.
John Stott dice: “La manera en que Pablo defiende la justicia de Dios es proclamando Su misericordia. Esto suena como un total non sequitur (no secuencia). Pero no lo es. Esto simplemente indica que la pregunta misma está mal formulada porque la base sobre la cual Dios salva a pecadores no es la justicia sino la misericordia”.
Ahora veamos un el ejemplo de Faraón.
Después de considerar a Moisés, el gran líder del pueblo de Dios durante el éxodo, Pablo ahora se vuelve al gran enemigo de los israelitas, el Faraón egipcio que los mantuvo como esclavos y se rehusó a dejarlos ir en libertad. Y lo hizo simplemente porque Dios había decidido que lo haría: “Te he levantado precisamente para mostrar en ti Mi poder, y para que Mi nombre sea proclamado por toda la tierra” (9:17, citando Éx 9:16). Así como Dios en su misericordia tiene compasión de los que Él escoge para tenerles compasión (Ro 9:15), así Él “endurece a quien Él quiere endurecer” (v 18).
Estos versículos son bastante difíciles; pero, una vez más, tienen sentido después de analizarlos un poco. En los versículos 17-18, Pablo usa a Faraón como un caso de estudio para demostrar cómo la soberanía de Dios se relaciona con la responsabilidad del hombre. Si regresamos a Éxodo 4 – 14 y leemos el relato de lo que sucedió, vemos un panorama fascinante. Por un lado, la Biblia nos dice que Dios endureció el corazón de Faraón: “Yo, por Mi parte, endureceré su corazón para que no deje ir al pueblo” (Éx 4:21—ver también 7:3; 9:12; 10:1, 20, 27). Dios dice que Él endureció el corazón de Faraón para cumplir Su plan (Ro 9:17).
Pero, por el otro lado, se nos dice que “Faraón endureció su corazón” (Éx 8:15—ver también 8:19, 32; 9:7, 17, 34). Y Dios le dice a Faraón que está siendo castigado porque “tú… sigues enfrentándote a Mi pueblo” (Éx 9:13-18).
¿Qué está diciendo la Biblia acerca del endurecimiento? Algunos creen que Faraón era un buen hombre, y que Dios vino y endureció su corazón. Pero esa interpretación no es justa. Si leemos lo que dice en Éxodo, veremos a Faraón esclavizando y buscando erradicar (por medio del infanticidio) a todo un pueblo, a los israelitas. Y así como vemos declaraciones de que Dios endureció su corazón, hay muchas otras que afirman que Faraón endurecía su propio corazón. De alguna manera, ambas son ciertas. Además, Pablo ya habló acerca de esto en Romanos 1:24. Dijo que los corazones humanos están llenos de codicia y que “por eso Dios los entregó” a sus malos deseos. Así que Pablo ya ha explicado detalladamente el punto que está mostrando en los versículos 9:17-18.
La manera en la que Dios endureció el corazón de Faraón fue “entregándolo” a su propia necedad. Faraón tomó la decisión de resistir a Dios; Dios consolidó su posición. Dios le dio a Faraón lo que él eligió. Cuando Dios endurece a alguien, Él no crea la dureza; Él simplemente permite que la persona vaya por su propio camino. Dios endurece a los que Él quiere endurecer. Y a todos los que Él endurece es porque quieren ser endurecidos.
Martyn Lloyd-Jones escribe: “El mundo cayó en pecado pero Dios le puso un límite, una restricción, y este mundo sería un completo caos y un infierno si Él no lo hubiera hecho así. Pero en el momento en que Él retira Su influencia restrictiva [en cualquier punto] hay endurecimiento… Así que esa es una de las formas en que Dios produce el endurecimiento… Él los deja seguir sus propios deseos”. (Romanos capítulo 9, p. 176)
Debemos poner mucha atención de cómo leemos la Biblia, si la BIBLIA TRATA DE NOSOTROS O DE CRISTO Y SU AUTORIDAD. Muchos vemos a través de la lente de nuestra cultura, o de nuestros propios contextos, es decir la esclavitud, la orfandad, sacar un ojo, odiar a su padre y madre y seguir a Jesús, etc. Es así que muchos sacan interpretaciones equivocadas y hacen sus sectas.
Hayamos un problema porque nosotros queremos suavizar los pasajes que nos incomodan o no nos agradan, por lo mismo que no sabemos de quien trata la biblia, y por ende no nos sometemos a Dios, por ejemplo. Las princesas de Dios en contraste con los esclavos de Cristo. Y si leemos en la biblia que somos reyes- a veces viene a la mente alguien apuesto, sentado en un trono o en una mesa come y come, con sus vestiduras reales, pero no su labor o desempeño como rey, si decimos que son princesas de Dios, quitamos toda responsabilidad de reyes, quitamos toda función y desarrollo como reyes. Ap. 1.6-8 “y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre; a él sea gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén. He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén. Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.”
Otro problema son las aparentes contradicciones que no nos dejan muy claro algunos casos, por un lado Pablo decía siervos sométanse a sus amos, o esclavos, y por otro lado decía si es posible hacerse libres háganlo. entonces es valida la esclavitud si o no, y es un sí y no, pero dentro del contexto de aquel tiempo, si una persona lo ve a la luz de los siglos xvi al xviii en México te diría que es algo malo y que hay que liberarse de tal cosa. NO PODEMOS DESESPERARNOS POR AQUELLOS QUE NO COMPRENDEN A LA PRIMERA, NECESITAMOS LEER BIEN NOSOTROS Y AYUDAR A OTROS A LEER CON DETENIMIENTO, PORQUE POR COSAS ASÍ ALGUNOS YA NO QUIEREN LEER MÁS O SE HACEN LLAMAR ATEOS.
Dios está deteniendo el mal, pero Él puede dejar que venga la avalancha de su propia maldad. BN Dios ha levantado a Cristo, la señal de nuestra misericordia, ¿a quién vas a recurrir en tu pecado, rebeldía, falla? ¿está tu vida comprometida con su Señorío o en rebeldía a Él? ¿Si estás batallando con alguna duda o algún pecado porque no te acercas a mi o alguno de los líderes, para juntos ir a Cristo?
Tu liberalismo, hacer las cosas a tu modo tiene una sentencia, tu legalismo también tiene una sentencia, BUSCA A CRISTO, NO ES BUSCAR QUE HACER, SINO A UNA PERSONA, para cuando hagas algo, entonces lo hagas bien, y cuando no lo hagas bien entonces, puedas arrepentirte y ser perdonado porque Dios ha querido mostrar su misericordia, como con Abraham, Isacc, Jacob, la nación de Israel.