NO TEMAS, CREE EN CRISTO (Marcos 5:21-43)
Evangelio según San Marcos • Sermon • Submitted
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1 LA AUTORIDAD DE CRISTO SOBRE EL SISTEMA (21-24)
2 LA AUTORIDAD DE CRISTO SOBRE LA ENFERMEDAD (25-34)
3 LA AUTORIDAD DE CRISTO SOBRE LA MUERTE (35-43)
Introducción
Seguimos con esta serie maravillosa.
Es casi imposible olvidar la transición desde la sección precedente (vv. 1–20) a ésta (vv. 21–43). Desde aquella petición que equivalía a “te rogamos que te vayas de aquí”, la historia avanza hasta una petición conmovedora: “te ruego que vengas» Como veremos en la petición de Jairo.
Vimos la autoridad de Cristo sobre la naturaleza, sobre los espíritus malignos y ahora lo veremos sobre la enfermedad y la muerte.
¿Como obra Cristo ante la enfermedad y ma muerto? ¿Que sígnificado tiene esto en nuestra vida? ¿Por qué no debemos temer?
1. LA AUTORIDAD DE CRISTO SOBRE EL SISTEMA (21-24)
1. LA AUTORIDAD DE CRISTO SOBRE EL SISTEMA (21-24)
Comenzamos con esta primer aparte. Y es muy reveladora, por mucho que uno tenga un poder de autoridad en este mundo, a la hora de la verdad no es nada comparado con la autoridad y poder de Cristo y lo vemos en esta primera parte.
a) Un principal de la sinagoga (21-22)
21 Cuando Jesús pasó otra vez en la barca al otro lado, se reunió una gran multitud alrededor de Él; y Él se quedó junto al mar. 22 Y vino uno de los oficiales de la sinagoga, llamado Jairo, y al verle se postró* a sus pies.
Pero, ¿Qué es un principal de la sinagoga?
Gran Diccionario Enciclopédico de la Biblia PRINCIPAL DE LA SINAGOGA
Cabeza o rector de una sinagoga, cuyo deber consistía en preservar el orden e invitar a las personas a leer o a hablar en la asamblea e imponer los castigos debidos a los transgresores.
Un jefe de la sinagoga postrado, un jefe de la sinagoga pidiendo misericordía, un jefe de la sinagoga con fe sabiendo que Jesús era la única solución al problema.
Esto es muy fuerte para el contexto judio…
Esto no era porque Jairo fuera más listo que nadie, sólo es posible por la fe dada por Dios para su gloria.
8 Porque por gracia habéis sido salvados por medio de la fe, y esto no de vosotros, sino que es don de Dios; 9 no por obras, para que nadie se gloríe.
Y Jairo por mucho principal de la sinagoga que fuera, sabía cual era el lugar más seguro en este momento, a los pies de Cristo.
b) Una petición (23)
23 Y le rogaba* con insistencia, diciendo: Mi hijita está al borde de la muerte; te ruego que vengas y pongas las manos sobre ella para que sane y viva.
Jairo iba con una fe asombrosa, y de este ejemplo tenemos que aprender todos
28 Venid a mí, todos los que estáis cansados y cargados, y yo os haré descansar.
a Jairo no le importaba lo que sus colegas pensaran o que su reputación en Capernaum ante los ojos de los hombres bajará… él tenía una carga que no era capaz de soportar y la fe dada por Dios le llevó a ver más allá que si mismo… poner los ojos en Cristo
2 puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, quien por el gozo puesto delante de Él soportó la cruz, menospreciando la vergüenza, y se ha sentado a la diestra del trono de Dios.
Del que verdaderamente tiene Autoridad sobretodas las cosas.
Y esto es bueno tenerlo en cuenta antes la vida.
Lo que realmente hizo Jairo fue humillarse ante la autoridad y majestad de Cristo.
c) Cristo acompaña y bendice al se le humilla (24)
24 Jesús fue con él; y una gran multitud le seguía y le oprimía.
Jesús tuvo misericordia, Jesús iba a mostrar la gloria de Dios, Jesús obra para su gloria porque las cosas acontecen según el orden y la voluntad de Dios.
Jairo se humilla y le hace una petición, Jairo antes ha sido dotado con la fe que sólo puede venir de Dios, todo apunta a un deselance glorioso para Dios.
En ese momento, la niña estaba enferma, pero como veremos, muchas veces Dios debe permitir cosas que no son de neustro agrada para que veamos su poder y majestad.
Y aquí estamos viendo la autoridad de Cristo por encima de los sistemas humanos, porque Él eta por encima de toda autoridad.
Y de camino sucederá otro hecho para su gloria… Lo que veremos que Dios tiene poder para obrar tantas veces quiera, como cuando, cuando quiera y donde quiera…
¿Aun no crees eso?
2. LA AUTORIDAD DE CRISTO SOBRE LA ENFERMEDAD (25-34)
2. LA AUTORIDAD DE CRISTO SOBRE LA ENFERMEDAD (25-34)
Y le acontece lo siguiente:
a) Una mujer con una enfermedad incurable (25-27)
25 Y una mujer que había tenido flujo de sangre por doce años, 26 y había sufrido mucho a manos de muchos médicos, y había gastado todo lo que tenía sin provecho alguno, sino que al contrario, había empeorado; 27 cuando oyó hablar de Jesús, se llegó a Él por detrás entre la multitud y tocó su manto.
Una mujer, que al igual que sufría esa enfermedad por 12 años, la misma edad que que tenía la hija de Jaior.
Había buscado soluciones en otros lados, médicos, gurús, echiceros, etc etc.
Que reflejados podemos sentirnos cuando buscamos la solución o la llenura en otros lugares, tales como la superstición, el dinero, el edonismo humanos. etc etc
Pues bien, esta enfermedad del flujo de sangre es similar a nuestra alma que se desangra por el pecado, que si no buscamos la solución con el que es indicado, vamos camino a la muerte, tal como lo vivía esta mujer.,
Per, ¿Por que hizo esta mujer eso? ¿Ir en busca de Jesús? Seguramente porque alguien le habló, y porque creyó gracias a la fe dada por Dios.
b) Una fe dada por Dios (28-29)
28 Porque decía: Si tan solo toco sus ropas, sanaré. 29 Al instante la fuente de su sangre se secó, y sintió en su cuerpo que estaba curada de su aflicción.
Esto solo puede venir de Dios. Creer que un hombre, hijo de un carpinterio, podría hacer este milagro, sino duda esto viene del toque de Dios a su corazón.
15 Él les dijo*: Y vosotros, ¿quién decís que soy yo? 16 Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente. 17 Y Jesús, respondiendo, le dijo: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque esto no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos.
c) Una confesión salvadora (30-34)
30 Y enseguida Jesús, dándose cuenta de que había salido poder de Él, volviéndose entre la gente, dijo: ¿Quién ha tocado mi ropa? 31 Y sus discípulos le dijeron: Ves que la multitud te oprime, y dices: «¿Quién me ha tocado?». 32 Pero Él miraba a su alrededor para ver a la mujer que le había tocado. 33 Entonces la mujer, temerosa y temblando, dándose cuenta de lo que le había sucedido, vino y se postró delante de Él y le dijo toda la verdad. 34 Y Jesús le dijo: Hija, tu fe te ha sanado; vete en paz y queda sana de tu aflicción.
Claro que Jesús le había tocado, y ese poder no fue como una descarga involuntaria, sino que fue por su propia voluntad.
¿Pero que hubiera pasado si Jesús no hace esta pregunta? QUe la mujer hiubiera quedado sana y nadie si hubiera enterado por la múltitud.
Seguro que fueron muchos los que estaban tocando a Jesús, pero fue esta mujer, sólo esta mujer ¿Por qué? Porque así fue la voluntad de Dios.
Y el fin del testimonio es confesar la gloria de Dios, los salvos harán esto.
Por eso la maravillosa respuesta de Jesús: tu fe te ha salvado.
4982. σώζω sózo; del prim. σῶς sós (contr. por el obs. σάος sáos, «seguro»); salvar, i.e. librar o proteger (lit. o fig.):—hacer salvo, librar, misericordia, preservar, salvar, sanar, sano.
Biblia Textual 4 Edición Capítulo 5
34 Entonces Él le dijo: Hija, tu fe te ha salvado, vete en paz y queda sana de tu azote.
Ahora pasamos a ver
3. LA AUTORIDAD DE CRISTO SOBRE LA MUERTE (35-43)
3. LA AUTORIDAD DE CRISTO SOBRE LA MUERTE (35-43)
a) Una pésima noticia (35)
35 Mientras estaba todavía hablando, vinieron* de casa del oficial de la sinagoga, diciendo: Tu hija ha muerto, ¿para qué molestas aún al Maestro?
La mala noticia llegó, debería ser ya algo desesperanzados, ya todo está perdido, ya de nada sirve, por eso la palabras del criado eran legítimas… no molestes, ya no hay nda que hacer.
No nos dice el evangelista la reacción de Jairo, pero seguro tuvo que rasgar su corazón.
Muchas veces el Señor nos lleva al desierto para mostrarnos su gloria.
b) Unas palabras consoladoras (36)
36 Pero Jesús, oyendo lo que se hablaba, dijo* al oficial de la sinagoga: No temas, cree solamente.
Cristo le dice, No temas, que palabras mas consoladora, cree solamente… Cristo afirmando su poder sobre la misma muerte, sobre lo que parece irreversible para el hombre.
Y realmente se encuentra en un contexto de velatorio:
c) El contexto (37-40)
37 Y no permitió que nadie fuera con Él sino solo Pedro, Jacobo y Juan, el hermano de Jacobo. 38 Fueron* a la casa del oficial de la sinagoga, y Jesús vio* el alboroto, y a los que lloraban y se lamentaban mucho. 39 Y entrando les dijo*: ¿Por qué hacéis alboroto y lloráis? La niña no ha muerto, sino que está dormida. 40 Y se burlaban de Él. Pero Él, echando fuera a todos, tomó* consigo al padre y a la madre de la niña, y a los que estaban con Él, y entró* donde estaba la niña.
La muerte de los justos es estar dormido, pues al resurreción viene en camino.
Esto es un tipo de lo que Jesús haría con su propia vida. Vencer a la muerte.
d) La victoria sobre la muerte (41-43)
41 Y tomando a la niña por la mano, le dijo*: Talita cumi (que traducido significa: Niña, a ti te digo, ¡levántate!). 42 Al instante la niña se levantó y comenzó a caminar, pues tenía doce años. Y al momento se quedaron completamente atónitos. 43 Entonces les dio órdenes estrictas de que nadie se enterara de esto; y dijo que le dieran de comer a la niña.
Como en otras ocasiones, Jesús cura con un simple toque (1:31, 41; 6:5; 7:32; 8:23, 25) y una orden (1:41; 2:11; 10:52). No utiliza oraciones, encantamientos o rituales, sino que habla con su propia autoridad mesiánica.
El arameo Talitha significa “corderito” y se usaba como diminutivo cariñoso para los niños, de ahí que la traducción de Marcos del arameo al griego sea “niña” (τὸ κοράσιον, un diminutivo).19
La autoridad de Cristo sobre la muerte..,
38 Porque estoy convencido de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni lo presente, ni lo por venir, ni los poderes, 39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios que es en Cristo Jesús Señor nuestro.
Y la niña revivió sin secuelas, se puso a comer. Muestra el amor y la misericordia de Dios, que no sólo nos regenera, nos hace vivir espiritualmente, sino que intercede y se preocupa con nuestro diario vivir.
CONCLUSIÓN
Que paradójico que la niña tuviera 12 años y la mujer sufriera la enfermedad por 12 años. Muchos no tienden a estos detalles, pero creo que no es casualidad.
Hay un similitud porque podemos ver algo entre lineas, o así por lo menos lo entiendo yo.
La niña y la mujer representa una vida, una condición, nuestra vida y nuestra condición antes de ser salvados.
Por un lado teníamos la emorragia desangrante del pecado en neustra alma que nos hacía malvivir. Por otro lado, estabamos muertos espiritualmente, necesitamos un sanador, y no había otro ni lo hay, que nuestro Señor Jesucristo.
Él es Dios, y su autoridad está por encima de la autoridad de los hombres, de la enfermdad y de la muerte.
Vimos anteriormente que también Él y su autoridad está sobre la naturaleza y los demonios, hoy, vimos, sobre los hombres, enfermedad y la muerte. Esto va al hilo del pasaje de Romanos 8.
Teniendo esto claro, no queda otra cosa que hacer como Jairo, estar a los pies de Cristo. Él en su trono, nosotros a su pies. Y hacer nuestras las Palabras que dijo Cristo a Jairo:
NO TEMAS, CREE SOLAMENTE. es como si dijera, no temas, cree en mi!.
Que el Señor bendiga su Palabra.
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.
ORACIÓN FINAL
Señor Dios, cocedenos la fe que sólo tu puedes dar para que podamos cree en ti sin temor a lo que nos rodea, que podamos poner nuestros ojos en ti, reconociendo tu autoridad por encima de todo, incluso de nosotros mismos. QUe podamos con confianza acercanos a ti y ser Iglesia en medio de este mundo caido. POr Jesucristo Nuestro Señor. Amén.
Apelamos a tu bendición
24 “El Señor te bendiga y te guarde; 25 el Señor haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; 26el Señor alce sobre ti su rostro, y te dé paz”».
Porque tuyo Señor, es el reino y el poder y la gloria por los siglos de los siglos. Amén».
Que la Bendición de Dios Todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo sea con todos vosotros. amén