Un esposo tallado por Cristo para preservar el honor de su esposa y proteger su hogar - Serie: Tallados por Cristo para ser familia 01

Tallados por Cristo para ser familia  •  Sermon  •  Submitted   •  Presented   •  50:18
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INTRODUCCIÓN

Vamos a comenzar una nueva serie: Tallados por Cristo para ser familia.
Es el nombre que hemos puesto a la serie y vamos a hablar en varios domingos sobre cada parte del hogar y la idea es pensar en cómo Cristo puede tallar cada parte de la familia para ser una familiar que lo honre y viva con propósitos de eternidad.
Hoy comenzamos con los esposos.
Hay muchos malos maridos en la Biblia. Es sorprendente la cantidad de ejemplos que puedes encontrar. Hay muchos más ejemplos de malos maridos que de malas esposas.
Pero sí buscas un ejemplo de un buen esposo, es difícil encontrar.
Le pregunté a mi esposa ¿Cómo debería ser un buen marido?
Pensé que iba a decir: “como tú” (lo que sueña cada esposo), pero ella dijo, como “José”.
..y los que se llamen José no se pongan felices, ¡no está hablando de ustedes!
Y sabes, los varones pocas veces pensamos en José como un buen referente, porque es una persona de la cuál no se habla mucho, tiene un trabajo humilde en un tiempo donde esto no es tan valorado, no parece ser alguien con el cuál podamos poner una medida de varón a alcanzar.
Pero después de estudiar la vida de José creo que todos o la mayoría de esposos, nos podríamos avergonzar. Tal vez es por eso, que las mujeres tienen a José silenciosamente como un ejemplo de marido ideal.
Así que creo que es necesario que conozcamos a un esposo realmente maravilloso, que fue José el carpintero, porque mientras más nos alejamos de José, nos alejamos más de ser buenos maridos.
Vamos a conocer al prototipo de varón olvidado. Pero creo que este hombre no es solo un buen esposo, sino que ha logrado lo que pocos buenos esposos pueden ser: hombres sujetos a la Voluntad y planes del Señor.
José fue un esposo tallado por Cristo para preservar el honor de su esposa, proteger su hogar y llevarlos a los propósitos del Señor.

EXÉGESIS

Mateo 1:18 RVR60
18 El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo.
Cuatro personajes en este versículo:
Los principales (Trinidad): Jesucristo y E.S.
María, quien fue escogida por Dios para ser la madre física de Jesús encarnado.
José, de quien no se dice mucho más que acompañar o complementar el relato de María.
“..Estando desposada María su madre con José,..”
El desposorio era un acuerdo para contraer matrimonio con un nivel de seriedad comparado al mismo matrimonio.
Algo totalmente distinto del noviazgo que hoy en día se conoce.
Actualmente y sobre todo en círculos no cristianos, uno cambia de novio o novia muchas veces, simplemente como si fuese precisamente “algo” un objeto para cambiar. El desposorio es totalmente diferente y por eso culturalmente hoy no tiene comparación con algo que conozcamos.
El desposorio tenía por objetivo la preparación del matrimonio, así como la vivienda que haría el varón para recibir a su esposa.
También incluía un pago anticipado de la dota o pago por la novia.
No se consumaba la unión física entre los desposados hasta el matrimonio. De hecho consideraba adulterio si no se cumplía esto en los esposos.
El desposorio era tan serio y había reglas establecidas desde la Ley de Moisés para este compromiso.
El desposorio es tan importante que es utilizado de ejemplo por Dios mismo: Is 62.5
Isaías 62:5 RVR60
5 Pues como el joven se desposa con la virgen, se desposarán contigo tus hijos; y como el gozo del esposo con la esposa, así se gozará contigo el Dios tuyo.
El desposorio es serio y es parte del proceso iniciado para concluir en matrimonio y establece la relación tan especial de un hombre y una mujer así como la de Dios con Su pueblo.
(Nuevamente diapositiva versículo):
Mateo 1:18 RVR60
18 El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo.
Así que sabemos que José y María tienen un compromiso solemne de matrimonio. Ellos deben estar muy contentos, es un compromiso de celebración.
“..antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo.”
Según los eruditos, probablemente María tiene 12 a 14 años (16 máximo) y José entre 18 a 20.
No te parezca malo el matrimonio de una adolescente de esa edad. Hoy culturalmente, vivimos en tradiciones y prácticas distintas. Esto era totalmente permitido y visto como correcto en la cultura judía.
Pero María resulta embarazada y la Escritura dice que había concebido del Espíritu Santo.
Recuerda la solemnnidad del compromiso que tienen.
Continua la narración bíblica:
Mateo 1:19 RVR60
19 José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente.
En el desposorio ellos ya son considerados realmente como marido y mujer, a excepción de que no han consumado físicamente la relación.
¡Pero hay un problema!
María está embarazada. José nunca tuvo contacto sexual con ella y aunque la Biblia no detalla mucho, esta debe ser una situación tan fuerte para ambos.
Imagina las palabras de una adolescente, de fe, entregada totalmente al plan de Dios, que tiene la fortaleza para estar frente al hombre con quien tiene un compromiso de vida y decirle que está embarazada, y que espera que el hombre crea que ella nunca ha estado con otro hombre, y no ha engañado a José.
Esto sí es un conflicto.
“José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente.”
Por fin tenemos una descripción de José. Es bastante joven pero sobre todo la Biblia identifica a este hombre como “justo”.
Justo - δίκαιος - (dikaios) (81 veces en el N.T.) - Adjetivo que denota un proceder o acciones de alto estándar de moralidad o justicia.
Esta primera descripción es algo que estamos buscando en nuestro tema o serie de “Una familia tallada por Dios”. No es un varón más, sino que es justo.
José no es un varón que actúa para con su esposa según las emociones, el enojo o la rabia, sino que su actuar estará sujetada a sus altas consideraciones de moralidad y justicia.
Pero sabes, esta es una de las partes más extraordinarias de este relato.
¿Por qué se lo llama justo?
Se ha dicho que José es amable o tiene un corazón tierno, pero aunque no podemos decir que no, el texto no nos lleva a pensar eso en primer lugar.
Esto es más complejo por el contexto y posible escenario
La ley de Moisés dice que lo que correspondería a María sería la muerte:
Deuteronomio 22:20–21 RVR60
20 Mas si resultare ser verdad que no se halló virginidad en la joven,21 entonces la sacarán a la puerta de la casa de su padre, y la apedrearán los hombres de su ciudad, y morirá, por cuanto hizo vileza en Israel fornicando en casa de su padre; así quitarás el mal de en medio de ti.
Legalmente lo que correspondía a María era ser apedreada. María al estar embarazada podría haberse hallado legalmente en “fornicación y adulterio”.
Un poco más adelante se establece el caso de una mujer desposada hallada en fornicación:
Deuteronomio 22:23–24 RVR60
23 Si hubiere una muchacha virgen desposada con alguno, y alguno la hallare en la ciudad, y se acostare con ella; 24 entonces los sacaréis a ambos a la puerta de la ciudad, y los apedrearéis, y morirán; la joven porque no dio voces en la ciudad, y el hombre porque humilló a la mujer de su prójimo; así quitarás el mal de en medio de ti.
En este caso debía morir tanto la mujer como el varón adúltero. Las exigencias de la Ley eran duras. Dios a través de Moisés había marcado o establecido reglas fuertes que marcaban los lineamientos de la conducta moral que se había perdido a causa del pecado.
Aunque la Ley demandaba la muerte, socialmente la comunidad judía no utilizaba la pena de muerte en ese tiempo.
Así que el castigo era la aparente infidelidad de María era la exposición pública y ser expuesta a la verguenza en la sociedad.
Legalmente la solución ahora pasaba por el divorcio.
José podría haber exigido el divorcio de María, de esta manera ella se exponía a la verguenza pública.
¿Entonces de qué manera era José justo? ¿No exigía la justicia presentar públicamente a María y dejar limpia la imagen de José, mientras María era tratada por infidelidad y adulterio?
Volvemos al versículo:
Mateo 1:19 RVR60
19 José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente.
“José su marido, como era justo..”
El sentido de justicia de José parece estar en lo siguiente:
Si José simplemente actuaba sobre su sospecha de infidelidad, sin tomar en cuenta el argumento de María, y la dejaba expuesta socialmente, entonces eso sería realmente actuar sobre algo “no seguro” y ser realmente “injusto”.
Tal vez para la sociedad era lo justo, pero él sabía de su amada otra versión de lo acontecido e interiormente no podría vivir de esa manera, con el remordimiento de haber expuesto a María si por ahí su extraño argumento fuese cierto.
Entonces, José es justo, porque no puede actuar bajo la ley esperada simplemente porque su esposa le ha dado otro argumento aunque muy extraño de lo sucedido.
¿Cuántos esposos hubiesen entregado a su esposa a la peor humillación social tan solo al enterarse de la noticia, sin escuchar o creer la voz de su esposa? Por esto José es justo.
E indudablemente hay una batalla interna en José. No quiere exponer a María por si lo que ha escuchado, aún sumamente descabellado fuese cierto, pero también lucha con la evidencia de que su esposa está esperando un hijo y naturalmente no hay muchas explicaciones a eso.
Así que José toma una decisión:
“..y no quería infamarla,..”
José a pesar de la que parecía muy mala noticia, María embarazada, ama a María.
A pesar de que seguramente su cabeza está dando vueltas por no entender lo que sucede, algo sí ha decidido y es que no va va a entregara a María para que sea avergonzada públicamente. Cuida su integridad ante el desconocimiento de lo absoluto y cierto de la situación.
A medida que vamos estudiando el texto y comparamos con nuestro medio, nos vamos dando cuenta dando cuenta de cuán importante es para una mujer o una esposa, que su marido la honre y cuide aún su honra delante de otras personas, y que considere su palabra, su versión, su punto de vista, en cada situación, con suma importancia y valor antes de tomar decisiones equivocadas, que terminarán en la humillación de la esposa cualquiera fuese el motivo.
“..quiso dejarla secretamente.”
Así que el camino elegido entre la duda de José y su justicia, parece ser el divorcio sin la exposición humillante de María.
Los divorcios representaban el repudio de un conyuge a otro por causas muy limitadas y una de ellas era la carta de divorcio por adulterio. Por tanto, significaba exponer a María al vituperio de la gente.
A pesar de que el matrimonio no se había consumado, ya el desposorio exigía que la única salida era el divorcio.
De hecho, cuando un hombre moría estando desposados ya se consideraba a la mujer “viuda”.
Legalmente aún desposados, el divorcio era una opción. En aquel tiempo, solo tenía que presentarse delante del juez pero con dos posibilidades:
Podía argumentar adulterio o simplemente podía ser considerado como un hombre de corazón endurecido que rechaza injustamente y sin motivo a una mujer noble.
Si no presenta “adulterio”, entonces él va a cargar la culpa de abandonar a una mujer y para la sociedad a su propio hijo que espera María.
Pero aún José está dispuesto a esto, a quedar mal delante de la comunidad, pero no va a “estigmatizar” a su esposa como “adúltera”.
José no quiere infamarla. No desea la verguenza pública para su esposa.
José prefiere la verguenza personal suya, a la de su esposa.
Y entonces, toma la decisión de no exponerla:
¿Piensas que esto era difícil para José? Con seguridad que sí, y también para María.
Mateo 1:20 RVR60
20 Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es.
“Y pensando él en esto,..”
¿En qué está pensando?
José no expondrá a María pero ciertamente lleva esto con dolor y no puede negarse a un hecho real, que María espera un hijo y no es suyo.
No debemos ser duros con José. Los argumentos de María sonarían bastantes fuera de lo común. Solo Adán y Eva, habían sido las únicas personas desde el inicio de la creación del mundo que no necesitaron de un hombre y una mujer para su concepción.
Lo cierto es que José ya está a punto de dejar a María.
Y es justamente que la intervención divina va al rescate tanto de María como de José:
“..he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es.”
Es reconocido como Hijo de David, aunque su padre no se llamaba David, sino que es una referencia a su ascendencia. Él era pariente o descendiente de David el gran Rey.
Debía recibir a María y a su hijo. Consumar el matrimonio a su tiempo, no separarse.
La confirmación de que todo esto eran los planes de Dios.
María no había sido infiel, sino al contrario una mujer que estuvo dispuesta a enfrentar una situación como esta, aún en estar en la línea de la duda por parte de José su amado. María era una mujer entregada al Señor.
Alivio para José. Recompensa de “justo”. Había hecho lo correcto al no exponerla públicamente. Había dejado la puerta abierta para saber si lo que María había dicho era verdad, y aunque parecía totalmente descabellado, fue confirmado por un ángel.
Mateo 1:21 RVR60
21 Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.
El mensaje del ángel a José viene acompañado de buenas nuevas de Salvación.
María había aceptado ser instrumento de Dios del acto más extraordinario de la humanidad, la salvación. Y José también podía ser parte.
Con la invitación del ángel, había planes para ambos.
Mateo 1:22–23 RVR60
22 Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta, cuando dijo: 23 He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros.
Hay tanto para decir en este versículo, pero nuestro énfasis el día de hoy, es la perspectiva de un hombre o esposo tallado por Dios. Así que solo vamos a decir que lo que estaba pasando era mucho superior a los planes de María o José. Sino era la provisión de Dios anticipada en tiempos anteriores por sus profetas, para salvación del mundo.
Volvemos a ver nuevamente a José:
Mateo 1:24 RVR60
24 Y despertando José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su mujer.
José es obediente. Es justo y es obediente.
Ha decidido ser partícipe e instrumento para que llegue la salvación.
“..y recibió a su mujer.”
El momento difícil ha pasado. José no tiene más dudas, Dios ha respondido a la necesidad de su corazón y a la de María también.
Ahora son un matrimonio alineado totalmente a los propósitos del Señor.
¿Y sabes? Siempre que sucede eso. Cosas maravillosas van a pasar en un hogar así.
José está actuando contra todo sentido común, pero justamente eso es lo que hacen la mayoría de hombres y mujeres de fe del Antiguo Testamento y ahora inaugurando un nuevo testamento, el primero de ellos en actuar así es José.
Mateo 1:25 RVR60
25 Pero no la conoció hasta que dio a luz a su hijo primogénito; y le puso por nombre JESÚS.
José no tuvo intimidad con María hasta que nació Jesús.
José ya estaría casado oficialmente con María pero se abstiene de consumar el matrimonio.
Muchos rabinos pensaban que los hombres tenían que casarse bastante jóvenes porque no podían resistir la tentación sexual, pero José vive con María, manifiestando un total autocontrol.
Ya no era solo un hombre, un buen esposo, un marido que sigue los propósitos del Señor, sino también un modelo de pureza sexual.
Y como parte de la obediencia y del significa que representaba para los propósitos de Dios, pone nombre al pequeño bebé “Jesús”, que quiere decir “Dios es salvación”.
No tiene ni la menor duda, que su esposa era una santa y pura mujer, y no tiene la menor duda que todo esto es obra de Dios para salvación.
José se ha convertido en un hombre admirable de fe.
Pero la historia de José todavía es mucho más grande, porque tiene un Dios sumamente grande, que puede transformar a esposos en verdaderos protectores y guías de su casa.
Un poco más adelante, a medida que Jesús era bastante pequeñito y que había un rey Herodes que quería matar a todos los niños para que no exista otro rey que no fuese él, sucedió esto:
Mateo 2:13 RVR60
13 Después que partieron ellos, he aquí un ángel del Señor apareció en sueños a José y dijo: Levántate y toma al niño y a su madre, y huye a Egipto, y permanece allá hasta que yo te diga; porque acontecerá que Herodes buscará al niño para matarlo.
José se ha vuelto el responsable de su casa, pero también en un esposo protector.
Está atento a los planes de Dios y Dios puede confiar en que Él hará estas tareas bien.
Mateo 2:14 RVR60
14 Y él, despertando, tomó de noche al niño y a su madre, y se fue a Egipto,
Como esposo y padre diligente, su prioridad de proteger a su familia le lleva a partir de inmediato a Egipto.
Ya luego hay pocas referencias a José.
Una de ellas es bastante llamativa.
José y María iban a celebrar la pascua todos los años a Jerusalén y Jesús se perdió a sus 12 años de ellos por 3 días y fue hallado en el templo sentado con los doctores de la ley.
Lucas 2:48 RVR60
48 Cuando le vieron, se sorprendieron; y le dijo su madre: Hijo, ¿por qué nos has hecho así? He aquí, tu padre y yo te hemos buscado con angustia.
José y María preocupados por Jesús. José se había convertido en el padre humano de Jesús.
No era su hijo de sangre, pero con seguridad que lo amaba como tal.
Lo maravilloso de esto es que Jesús, con toda su investidura divina y humana al mismo tiempo, va a sujetarse a José.
Lucas 2:51 RVR60
51 Y descendió con ellos, y volvió a Nazaret, y estaba sujeto a ellos. Y su madre guardaba todas estas cosas en su corazón.
José era un padre a quien un hijo como Jesús podía sujetarse y con seguridad que su esposa también.
De las tan poquitas cosas que se dicen de José, hay tanto por hablar de él, pero el tiempo es breve, y quiero darte tan solo una más.
Que me parece maravillosa.
¿Sabes cómo se identifica muchas veces a Jesús cuando él ya es mayor?
Como el hijo de José o el hijo del carpintero.
Lucas 4:22 RVR60
22 Y todos daban buen testimonio de él, y estaban maravillados de las palabras de gracia que salían de su boca, y decían: ¿No es éste el hijo de José?
Mira este otro versículo:
Mateo 13:55 RVR60
55 ¿No es éste el hijo del carpintero? ¿No se llama su madre María, y sus hermanos, Jacobo, José, Simón y Judas?
Jesús era el hijo del carpintero José.
En un pasaje paralelo de Marcos, es a Jesús a quien se le identifica como carpintero:
Marcos 6:3 RVR60
3 ¿No es éste el carpintero, hijo de María, hermano de Jacobo, de José, de Judas y de Simón? ¿No están también aquí con nosotros sus hermanas? Y se escandalizaban de él.
Los hijos habitualmente adquirían o aprendían el oficio del padre desde pequeños. Al parecer Jesús era carpintero también, al igual que su padre José.
Hay hombres poderosos, llenos de gloria como Salomón. Se dice que no hubo rey tan lleno de gloria como Salomón (1 Cr 29.25). Pero creo que un carpintero de Nazaret, padre de Jesús y esposo de María, no cambiaría nada de lo que tiene ni aún por toda la gloria de Salomón.
Eso es lo que había logrado un joven de 20 años aproximadamente, al ser justo, al amar a su esposa, al no ser injusto y no exponer a su esposa a la humillación sin motivo. Al haber aceptado humildemente la responsabilidad encomendada por Dios, al haber sido diligente en cuanto a ser un varón protector de su familia, en ser un esposo ejemplar, ejemplo de pureza sexual, ejemplo de quién estaría dispuesto a no entregar a su esposa aún en la situación más fuera de lo común, y quien prefería llevar el la verguenza antes que exponer a su esposa. Esto es lo que había logrado José al estar preocupado por su hijo y ser reconocido como padre por Jesús, y ser honrado con la sujeción de un joven Jesús que iba creciendo y que al mismo tiempo era Dios en la carne. Esto había logrado un varón de Dios que había enseñado su oficio a su hijo hasta verlo convertido en un hombre.

MEDITEMOS EN LA PALABRA.

Ya no se nos dice más de José en las Escrituras. La tradición cristiana creía que como se dejó de mencionar a José y luego aparece solo María, José habría muerto en algún punto entre los 12 años y los 30 de Jesús.
Ciertamente, no lo sabemos, pero un día vamos a preguntárselo. Cómo fue todo. Pero mientras tanto, la responsabilidad de ser esposos tallados por Dios, al igual que José queda para nosotros.
Algunos principios que podemos aprender de José:

Un esposo tallado por Cristo buscará la honra de su esposa y esa será la prioridad en sus decisiones, actuando siempre con justicia. Anhelará la integridad de su esposa y en todo caso estará dispuesto a sacrificarse por ella.

Ya comprendo por qué José en el silencio de muchas mujeres es el modelo de esposo ideal.
Porque los esposos hemos dejado de honrar a nuestros esposas, fácilmente las exponemos. Carecemos de la justicia o de ser justos. Nos dejamos llevar por las emociones o por el momento.
Aún en muchas mesas tal vez somos los primeros en hablar mal de ellas. No guardamos su integridad y hasta para guardar la nuestra estamos dispuestos a sacrificar la de ellas.
Pero si nos dejásemos tallar como esposos por Cristo, seríamos más como José.
Queridos esposos, José estaba dispuesto a ser considerado como un hombre insensato que abandona a su esposa sin motivo alguno por no infamarla. Pero muchas veces nosotros somos tan insensatos sin motivo alguno porque infamamos la dignidad de nuestras esposas.
Tal vez es tu caso. Tal vez tu matrimonio está mal y seguro hay muchos aspectos en esto, pero Dios busca varones que honren a sus esposas con su boca y sus actos. Y dentro de muchos problemas que puede haber en tu matrimonio, tal vez uno muy grande, y no te has dado cuenta, es que no cuidas el honor de tu esposa.
¡Ya no más!
1 Pedro 3:7 RVR60
7 Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo.

Un esposo tallado por Cristo aceptará la voluntad de Dios encontrada en Su Palabra y entregará la confianza total de su familia al Señor, actuando en obediencia para ser él y su casa, instrumentos de salvación.

Lo maravilloso de José va más allá de ser solo un buen esposo. El punto más fuerte es que es un esposo que acepta la voluntad de Dios y es obediente al Señor.
Sólo así se puede ser un esposo tallado por Dios.
!José reacciona rápidamente a la voz del ángel, pero muchas veces nosotros cómo tardamos en reaccionar a la voz de Dios en Su Palabra!
No se mide a un esposo que agrada a Dios por la cantidad de flores o por cuántas veces ha preparado el desayuno, porque muchos buenos esposos del mundo hacen eso. El verdadero valor está en hombres que se humillan ante Dios y buscan Su Voluntad y anhelan que esa sea la voluntad para Su familia también.
Un esposo tallado por Dios, permitirá que su familia tenga una total dependencia en Él.
Si quieres cosas prácticas, necesitamos que muchos esposos, lleven a sus esposas y a sus hijos, a ser parte activa del ministerio de la iglesia. Que muchos esposos se levanten un sábado dispuestos a sacrificar algunas actividades por permitir que sus esposas e hijas participen de los planes o actividades misioneras, evangelísticas.
!No vayas a ser hallado privando a tu esposa y familia de ser instrumentos de salvación¡
Josué 24:15 RVR60
15 Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Jehová.

Un esposo tallado por Cristo es el protector de su esposa y hogar, al mismo tiempo que encamina a los suyos hacia Cristo y Sus propósitos.

Desde proteger a su esposa del vituperio hasta proteger a su esposa e hijos escapando del asesino de Herodes. José diligentemente cuidaba de los suyos.
Creo que algo en común que tienen muchas esposas es que no se sienten protegidas sino expuestas por sus propios maridos.
José tuvo el más grato honor de ser el padre físico de Jesús, y aún Jesús pudo crecer con el oficio de José que era el ser carpintero. Relamente José encaminó en muchas cosas al hombre Jesús y Jesús se sujetó a él hasta la edad en la que fue un hombre responsable y formado, con miras para asumir su ministerio.
Necesitamos proteger a los nuestros pero de la forma que los acerquemos a los propósitos de Dios.
¿Sabes que tu esposa y tus hijos, están expuestos a toda clase de peligros, no solo peligros físicos, sino también situaciones de abuso emocional, situaciones de enseñanza de diversas doctrinas, pensamientos del mundo que no son los de Dios?
¿Quién los protege? Dios no ha dado la responsabilidad a los esposos de cuidar a nuestras esposas. ¿Pero cómo las cuidaremos si no sabemos de qué?
No comprendemos la Biblia, no nos preparamos para conocer más sobre la Voluntad de Dios. No tenemos un discernimiento desarrollado. No crecemos espiritualmente.
Mientras protejamos a nuestra familia tan solo por nuestros pensamientos, muchas veces vamos a fallar. Tal vez hasta los vamos a exponer más.
José protegía a su familia de situaciones reales porque estaba atento a la voz de Dios, que se manifestaba con el ángel enviado en varias ocasiones.
¿Estamos atentos a la voz de Dios en Su Palabra? o ¿es que acaso las esposas necesitan ser protegidos pero de sus insensatos esposos?
Proverbios 12:7 RVR60
7 Dios trastornará a los impíos, y no serán más; Pero la casa de los justos permanecerá firme.

CONCLUSIÓN

José ha pasado a la historia como alguien poco atendido o desconocido, pero probablemente es la mejor referencia de marido que tenemos en la Escritura fuera de Cristo como el esposo de la iglesia, pero esto veremos un poco más adelante.
Cristo sigue tallando esposos y puede hacerlo hoy contigo si tan solo te entregas a Él. Esposos que lleven dignidad a su esposa y a su hogar, que los protegan en el Señor, que pongan atención a Su voz en Su Palabra y que guíen a su familia hacia Sus propósitos.
Si no has conocido a Cristo también hoy puedes entregarte a Él por fe y arrepentimiento.
Vamos a orar.