La grandeza del servicio
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· 1,141 viewsLa grandeza de los hijos de Dios radica en su humildad y disposición a servir.
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La grandeza del servicio
La grandeza del servicio
Marcos 10:42–45
42 Mas Jesús, llamándolos, les dijo: Sabéis que los que son tenidos por gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y sus grandes ejercen sobre ellas potestad.
43 Pero no será así entre vosotros, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor,
44 y el que de vosotros quiera ser el primero, será siervo de todos.
45 Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.
Introducción
Introducción
Los discípulos en varias ocasiones escucharon al Señor predicar de la venida del Reino de Dios.
Creían que se refería a un reino terrenal.
Jacobo y Juan, siendo de los tres íntimos amigos de Jesús, junto a Pedro. Quieren utilizar la confianza de la amistar de Jesús y adelantarse para pedir un lugar especial en el reino de Jesús.
Esta petición enojó a los otros, pues de la misma manera tenían distorsionado el concepto del reino de Dios.
La motivación de estos hombres era obtener grandeza, señorío sobre otras personas. Estos deseos estaban alimentados por el orgullo y la codicia.
Sentimientos que deben ser eliminados para alcanzar la grandeza en el reino de Dios, y revestirse con humildad y actitud de servicio.
El Orgullo
El Orgullo
Es necesario entender y reconocer que el pecado y el orgullo son lo mismo. Fue el mal que afectó a Lucifer:
Isaías 14:13–14
13 Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte;
14 sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo.
Querer la grandeza egoísta, la gloria que solo le pertenece a Dios. Obtener la exaltación y servicio que solo pertenece a Dios.
Satanás estimuló la codicia y el orgullo para tentar a Eva:
Génesis 3:4-5
“Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis; sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.”
Todos hemos pecado, y por tanto el orgullo es un mal contra el que debemos luchar. Mientras no reconozcamos y rompamos las ataduras de orgullo, no podremos ser obedientes a Dios y su Palabra.
Este mal lo vemos en los discípulos.
Humildad y Servicio
Humildad y Servicio
El Señor aclara a los discípulos, que la grandeza del reino de Dios es la humildad y el servicio.
Marcos 10:43 “Pero no será así entre vosotros, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor.”
El Señor aclara los ojos de los discípulos, les hace ver que el orgullo y la codicia son males que los alejan del reino de Dios, y si desean alcanzarlo, deben despojarse de esos males, que han recibido por medio de la cultura y enseñanza terrenal.
Efesios 4:22-23 “En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos,y renovaos en el espíritu de vuestra mente.”
Llegar a reconocer el problema del orgullo es el primer paso para encaminar nuestros pasos en el reino de Dios, el segundo paso es cambiar las enseñanzas del mundo por las del reino de Dios.
Renovar el espíritu de nuestra mente es cambiar la vieja manera de pensar y actuar; y cambiarla por las enseñanzas bíblicas, y ponerlas en práctica.
La cultura, mentalidad y conducta del mundo es contraria a Dios, por eso debemos renunciar a ella.
Isaías 5:20 “¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!”
El ejemplo de Cristo
El ejemplo de Cristo
Marcos 10:45 “Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.”
El Señor tiene la gloria en el cielo, los ángeles le sirven y le adoran.
Sin embargo, siendo Dios se despojó de su gloria, y se humilló a tomar forma de siervo, poniéndose como ejemplo perfecto de humildad y servicio.
Jesús lavó los pies a sus discípulos (Juan 13) para enseñarnos a que la grandeza del reino es el servicio. Esto nunca lo veremos en los grandes de este mundo.
Juan 13:15
Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis.
Como hijos de Dios somos llamados a imitar su ejemplo, debemos dudar de nuestra conversión si aun nos resistimos a servir a Dios, no hemos llegado a comprender las realidades del reino de Dios y aun somos influenciados por la manera de pensar del mundo.
No somos llamados a ser servidos sino a servir.
Conclusión
Conclusión
La prioridad más grande del ser humano debe ser agradar a Dios, por sobre todo lo demás. Sin embargo, la humanidad se ha revelado contra Dios y quiere ocupar su lugar de gloria y preeminencia.
Como cristianos es necesario cambiar es mentalidad mundana. Por sobre todas las cosas, Dios tiene el primer lugar, si entendemos esto y lo ponemos en práctica, tendremos éxito en nuestra vida, aun cuando a los ojos del mundo no lo parezca.
No podemos seguir poniendo excusas para servir a Dios, estas no tendrán ninguna validez ante el tribunal de Cristo. “Mateo 25:41-42 Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles.Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber;”
Como iglesia somos llamados a anunciar el evangelio, esta es la principal comisión de la iglesia, y absolutamente todos somos llamados a realizar esta tarea.
Le invito a que se comprometa con Dios, no siga claudicando en dos pensamientos, métase de lleno a servir a Dios.
Mateo 24:46–47
46 Bienaventurado aquel siervo al cual, cuando su señor venga, le halle haciendo así.
47 De cierto os digo que sobre todos sus bienes le pondrá.