El llamado de Dios
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· 435 viewsEl llamado de Samuel nos presenta algunos detalles que pueden servirnos a nosotros para discernir la voz de Dios.
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El llamado de Dios
El llamado de Dios
1º Samuel 3:1–10 (RVR60)
1 El joven Samuel ministraba a Jehová en presencia de Elí; y la palabra de Jehová escaseaba en aquellos días; no había visión con frecuencia. 2 Y aconteció un día, que estando Elí acostado en su aposento, cuando sus ojos comenzaban a oscurecerse de modo que no podía ver, 3 Samuel estaba durmiendo en el templo de Jehová, donde estaba el arca de Dios; y antes que la lámpara de Dios fuese apagada, 4 Jehová llamó a Samuel; y él respondió: Heme aquí. 5 Y corriendo luego a Elí, dijo: Heme aquí; ¿para qué me llamaste? Y Elí le dijo: Yo no he llamado; vuelve y acuéstate. Y él se volvió y se acostó. 6 Y Jehová volvió a llamar otra vez a Samuel. Y levantándose Samuel, vino a Elí y dijo: Heme aquí; ¿para qué me has llamado? Y él dijo: Hijo mío, yo no he llamado; vuelve y acuéstate. 7 Y Samuel no había conocido aún a Jehová, ni la palabra de Jehová le había sido revelada. 8 Jehová, pues, llamó la tercera vez a Samuel. Y él se levantó y vino a Elí, y dijo: Heme aquí; ¿para qué me has llamado? Entonces entendió Elí que Jehová llamaba al joven. 9 Y dijo Elí a Samuel: Ve y acuéstate; y si te llamare, dirás: Habla, Jehová, porque tu siervo oye. Así se fue Samuel, y se acostó en su lugar. 10 Y vino Jehová y se paró, y llamó como las otras veces: ¡Samuel, Samuel! Entonces Samuel dijo: Habla, porque tu siervo oye.
Introducción
Introducción
En la historia del profeta Samuel vemos el plan perfecto de Dios, desde el clamor angustioso de su madre Ana, hasta el ungimiento de David como rey vemos que todos ellos estaban en el plan de Dios para que Cristo viniera al mundo a morir por nuestros pecados.
En una época en la que la Palabra de Dios escaseaba, Dios levanta a un niño para proclamar su Palabra.
Los sacerdotes hijos de Elí cometían pecados abominables a los ojos de Jehová, por lo cual los desechó: “Los hijos de Elí eran hombres impíos, y no tenían conocimiento de Jehová. 1 Samuel 2:12”. El puesto, titulo o experiencia no te convierten en cristiano.
Veremos algunos detalles del llamado de Samuel que nos ayudarán a conocer la voz de Dios.
Dios llama a quien Él quiere
Dios llama a quien Él quiere
Cuando Dios llama a Samuel era un niño entre 6 y 11 años, aun no conocía a Jehová (1 Samuel 3:7), no sabía que Dios le estaba llamando. No podía jactarse Samuel de haber sido llamado por su experiencia, récord de servicio, conocimiento teológico. “Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia. Romanos 9:16”
Para cada uno de nosotros Dios tiene un propósito para su servicio, aunque su llamado se para una tarea sin reconocimiento humano, siéntete dichoso porque el más pequeño entre nosotros es el más grande (Lucas 9:48)
Charles Spurgeon aceptó a Cristo el 6 de Enero de 1850, en una iglesia metodista, ese domingo el pastor no llegó por una fuerte tormenta de nieve, un hermano sin experiencia en la predicación, trató de predicar en Isaías 45:22 “Mirad a mi, y sed salvos, todos los términos de la tierra, porque yo soy Dios, y no hay más.” Aquel domingo solo asistieron 15 personas al culto, pero después de predicar unos pocos minutos, invita a Charles a entregar su vida a Cristo. No sabía que Dios lo usaba en sus pocos recursos para traer a sus pies a quien sería un gran predicador.
No te preocupes pensando que Dios te hará un llamado muy difícil, recuerda que sus pensamientos no son nuestros pensamientos, ni nuestros caminos sus caminos.
Él te escoge para una tarea que podrás realizar porque no es en tus fuerzas sino en las de Él.
La instrucción de Samuel
La instrucción de Samuel
9 Y dijo Elí a Samuel: Ve y acuéstate; y si te llamare, dirás: Habla, Jehová, porque tu siervo oye. Así se fue Samuel, y se acostó en su lugar.
Samuel aun no conocía la voz de Dios, por eso necesitaba la instrucción de Elí, aunque su pérdida de la vista era una figura de su pérdida de la visión de Dios, pero Elí aun tenía el discernimiento que le faltaba a Samuel.
El ser llamado por Dios no significa que ya no necesites de tu cobertura espiritual, al contrario es cuando más la necesita.
Si tu crees que Dios te está llamando, no desprecies la instrucción.
Necesitas instrucción porque debes aprender a discernir las voces que escuchas, la piedad de Samuel lo llevó a dirigirse a su cobertura cuando escuchó la voz, para recibir instrucciones.
Si no aprendemos a discernir la voz de Dios, podremos confundirnos la voz de Dios con otras voces.
La humildad de Samuel
La humildad de Samuel
Cuando Dios llama la tercera vez a Samuel, sigue las instrucciones de Elí, entonces Dios le habla y le revela la Palabra que debía proclamar.
Sin embargo, eso no provocó en Samuel soberbia ni orgullo.
“Y Samuel estuvo acostado hasta la mañana, y abrió las puertas de la casa de Jehová. Y Samuel temía descubrir la visión a Elí. 1º Samuel 3:15”
Al día siguiente siguió cumpliendo con sus tareas como siervo del templo.
La Palabra de Dios revelada a Samuel era contra el sacerdote Elí y su familia, sin embargo Samuel no lo despreció, pues en su humildad comprendía que era un asunto entre Dios y el sacerdote, y Samuel era solamente un instrumento.
No te enorgullezca cuando Dios comience a usarte, sigue humilde, respetando tu cobertura, si tiene que ser desechada como Elí será Dios quien lo haga no nosotros. Es el ejemplo que vemos en David con Saul. “Y dijo a sus hombres: Jehová me guarde de hacer tal cosa contra mi señor, el ungido de Jehová, que yo extienda mi mano contra él; porque es el ungido de Jehová. 1 Samuel 24:6”
Conclusión
Conclusión
Dios puede llamarte para su propósito, sin embargo, si desprecias la instrucción y te enorgulleces porque Dios te usa, entonces no seras escogido.
En los caminos de Dios encontraremos personas llamadas pero no escogidas “Porque muchos son llamados, y pocos escogidos. Mateo 22:14”
Los hijos de Elí eran los llamados a proclamar el mensaje profético para el pueblo, pero no fueron escogidos por su desprecio a las cosas de Dios.
Samuel fue llamado, y por su temor a Dios fue escogido desde muy joven para llevar Palabra de Dios a Israel.
Aunque el mundo trata de desprestigiar el llamado de Dios, haciéndote creer que es para los ignorantes, recuerda que la sabiduría del mundo es insensatez para Dios (1 Cor 3.19)
Dispón tu vida a obedecer el llamado de Dios, pues su principal llamado es que todos vengan arrepentidos a Él. “Entre tanto que se dice: Si oyereis hoy su voz, No endurezcáis vuestros corazones, como en la provocación. Hebreos 3:15”