El reposo de Cristo
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· 24 viewsEl descanso anhelado por el alma solamente se encuentra en Cristo.
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El reposo de Cristo
El reposo de Cristo
Mateo 11:28–30 (RVR60)
28Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. 29Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; 30porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.
Introducción
Introducción
Uno de los requisitos para recuperarse de un vicio es reconocer su condición.
Así mismo, para encontrar descanso en Cristo es necesario reconocer nuestra necesidad e incapacidad para encontrar descanso por nuestros medios.
El descanso de este mundo es pasajero. Juan 4:13-14 Respondió Jesús y le dijo: Cualquiera que bebiere de esta agua, volverá a tener sed; mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás...
La carga
La carga
Las cargas no son los hijos, el matrimonio, trabajo, responsabilidades… tampoco los problemas.
Son los sentimientos negativos que estos provocan.
Angustia, preocupación, temor, enojo, decepción, amargura, depresión, etc. que producen enfermedades piscosomaticas.
Llevad mi yugo
Llevad mi yugo
El yugo es una carga, parece contradictorio decir que el yugo de Cristo da descanso.
El yugo de Cristo es ocuparse de las cosas espirituales, porque a la medida que nosotros nos ocupemos de las cosas de Dios, Él se ocupa de las nuestras. Mateo 6:33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
La invitación
La invitación
El Señor llama a todos, niños, jovenes, adultos, ancianos, hombres, mujeres, ricos, pobres, analfabetos y letrados a encontrar descanso en Él.
Su invitación es incondicional, Él desea darle descanso porque le ama. Su condición es unicamente botar esa carga que le agobia y le está robando la vida.
Conclusión
Conclusión
Pedro se sentía cargado después de negar a Jesús, El Señor en lugar de reclamarle, le dio de comer, lo atendió y le pidio que apacentara sus ovejas.
No razone su invitación, no se justifique, no piense que Él le reclamará por sus faltas, su amar es tan grande que está dispuesto a perdonar.
Bote su carga hoy delante del Señor.