En la vida o la muerte- Cristo. Filipenses 1:21-30
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· 4,053 viewsFilosofía de la vida cristiana - Introducción; la sensación de Paul por los filipinos; lazos y aflicciones más adelante el evangelio; en la vida o la muerte, Cristo
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¡Amén! ¡Qué gran bendición estar con ustedes esta semana mientras estudiamos versos por verso a través del libro de Filipenes!
¿Estás emocionado de estudiar la palabra de Dios juntos? ¡Sé que estoy emocionada de estudiar este pasaje contigo!
La semana pasada miramos versículos 12-20 y Bonos y aflicciones más lejos del evangelio.
A veces que pasamos por situaciones y a veces es algo que deseamos que nunca sucediera. Cáncer, perder a un miembro de la familia o amigo, perder un hogar o carro, alguien cercano a ti se enferma o tú mismo te enfermas. No importa lo que sea, cuando un hijo de Dios fue colocado en nuestras vidas por Dios para hacernos más fuertes y acercarnos a él. Y a través de todo esto el reino de Dios puede ir más lejos.
Esta semana vamos a echar un vistazo a los versículos 21-30. OK? Amén! Vamos a leer
Filipenses 1:21-30
21 Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.
22 Mas si vivo en la carne, este es el fruto de mi trabajo; no sé entonces qué escoger.
23 Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor;
24 pero quedar en la carne es más necesario por causa de vosotros.
25 Y confiado en esto, sé que quedaré y permaneceré con todos vosotros, para vuestro provecho y gozo de la fe,
26 para que abunde vuestro regocijo por mí en Jesucristo por mi presencia otra vez entre vosotros.
27 Solamente que os comportéis como es digno del evangelio de Cristo; para que, ya sea que vaya a veros, o que esté ausente, oiga de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, unánimes combatiendo juntos por la fe del evangelio;
28 y en nada intimidados por los que se oponen; que a ellos ciertamente es indicio de perdición, pero a vosotros de salvación, y esto de Dios.
29 Porque a vosotros es concedido por Cristo, no sólo que creáis en Él, sino también que padezcáis por Él,
30 teniendo el mismo conflicto que visteis en mí, y ahora oís está en mí.
el título de este mensaje es “En la vida o la muerte- Cristo.” Comenzamos con versículo 21
V21
Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.
Note en tu Biblia que el verbo “es” está en cursiva. Eso significa que no está en el original, sino que se ha añadido para aclarar el significado. El versículo es, en realidad, : “Para mí vivir a Cristo y morir ganando.”
Esta es la filosofía de la vida cristiana: vivir a Cristo; morir ganando. Dr. William L. Pettinill solía decir que la ganancia siempre es más de lo mismo. Si vivir es Cristo, entonces morir sería más de Cristo. Significa ir y estar con Él.
Aunque me ha llevado mucho tiempo llegar a esta conclusión, estoy convencido de que lo más importante de mi vida como Cristiano es tener la realidad de Jesucristo en mi vida. Esto no es muy popular hoy. La gente preferiría hablar de ser dedicada, querer servirle, o hacer esto y eso. Pero lo más importante es tener una relación con Él para que tu alegría esté llena. Entonces tendremos un testigo poderoso. El problema es que la mayoría de la gente quiere el fin pero olvídate de los medios. Los medios, en este caso, son la relación con el Señor Jesucristo. Todo lo demás es el fruto de esta relación. Para mí vivir a Cristo, morir es estar con Él.
Ahora sabemos por qué Pablo no se vio molestado por las críticas que le estaban haciendo. No puedes herir a un hombre que está en un relación con Jesucristo. ¿Qué le harían a un hombre así? "Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia." es un nivel alto en el que vivir. Ojalá pudiera decir que he llegado a ese nivel. Estoy en camino, y no he llegado, pero ese es mi objetivo. ¡Qué glorioso es!
V22
Mas si vivo en la carne, este es el fruto de mi trabajo; no sé entonces qué escoger.
Pablo no sabía sobre su futuro, como tú y yo no sabemos sobre nuestro futuro. No sabemos qué hará cualquier día.
Adoniram Judson fue el primer misionero enviado desde América. él y su primera esposa fueron a la India y, poco después, a Birmania, donde trabajó casi cuatro décadas. Después de catorce años, tuvo un puñado de conversos y se las arregló para escribir una gramática birmana. Durante ese tiempo sufrió una horrible prisión durante un año y medio y perdió a su esposa e hijos por enfermedades. Como Pablo, anhelaba estar con el Señor, pero también como el Enviado, consideró que su trabajo para Cristo era infinitamente más importante que sus anhelos personales. Por lo tanto, oró para que Dios le permitiera vivir lo suficiente para traducir toda la Biblia a Birmania y establecer una iglesia allí de al menos cien creyentes. El Señor concedió esa petición y también le permitió compilar diccionarios birmanos-ingles e ingles-birmanos, que se convirtieron en invaluables para los trabajadores cristianos, tanto extranjeros como birmanos, que lo siguieron. Escribió: "Si no hubiera sentido seguro que cada juicio fuera ordenado por amor y misericordia infinitos, no habría podido sobrevivir a mis sufrimientos acumulados".
No conocemos nuestro futuro pero podemos ser fructíferos si continuamos en nuestro trabajo de amor en Cristo.
V23-24
Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor; pero quedar en la carne es más necesario por causa de vosotros.
Pablo dice que fue desgarrado entre querer ir a estar con el Señor, que es lo mejor de los dos, o quedarse con los creyentes Filipios porque lo necesitaban.
Me recuerda una historia de un incidente que tuvo lugar en una iglesia. El predicador preguntó una noche: “¿Cuántos de ustedes quieren ir al cielo?» Todos levantan la mano excepto un niño pequeño. El predicador le preguntó: “¿No quieres ir al cielo?” Respondió el niño: “Claro que sí, pero pensé que ibas a tomar un grupo esta noche.”
Todos queremos ir al cielo, pero no ahora mismo.
También quisiera decir que versículo 23 rechaza la falsa doctrina del sueño del alma, la enseñanza de que los muertos existen en un estado de inconsciencia hasta su resurrección. Cuando los creyentes mueren, salen inmediatamente para estar con Cristo, como el ladrón penitente en la cruz, a quien Jesús dijo: “Hoy estarás conmigo en el paraíso.” Hay muchos pasajes más que se refieren a esta misma cosa también. El Nuevo Testamento usa el sueño como metáfora para la muerte. Esteban "llamó al Señor y dijo: “Señor Jesús, recibe mi espíritu. Y arrodillándose, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió.” Hechos 7:59-60.
Esta es una falsa enseñanza que está haciendo su camino hacia nuestra sociedad lentamente y debemos predicar en contra de ella.
V25-26
Y confiado en esto, sé que quedaré y permaneceré con todos vosotros, para vuestro provecho y gozo de la fe, para que abunde vuestro regocijo por mí en Jesucristo por mi presencia otra vez entre vosotros.
Pablo es práctico. Todavía tiene trabajo que hacer. Esta gente necesita su ministerio. Quería salir de prisión y volver a estar con ellos.
La gente que siempre dice: “¡Si el Señor llegara!”, debería estar ocupada. Este es el único lugar donde podemos hacer cualquier trabajo que cuente para una recompensa para Él. Este es el escenario en el que tú y yo desempeñamos nuestro papel. Quiero quedarme el mayor tiempo posible, y le prometí al Señor que enseñaré la palabra mientras me deje quedarme.
¡Amén!?
V27
Solamente que os comportéis como es digno del evangelio de Cristo; para que, ya sea que vaya a veros, o que esté ausente, oiga de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, unánimes combatiendo juntos por la fe del evangelio;
Esto significa tu forma de vida. No sólo nuestro discurso, sino que toda nuestra forma de vida debe ser un crédito al evangelio de Cristo.
“estáis firmes en un mismo espíritu, unánimes combatiendo juntos por la fe del evangelio;” ¡Oh, Cómo la gente de Dios necesita estar unida para el fomento del evangelio! Si la iglesia fuera lo que debería ser hoy en el mundo, el mundo escucharía el mensaje que proclama.
Aquí Pablo usa la palabra “combatiendo” que es tan diferente de la palabra luchar sobre la que escribió antes en el capítulo. En la palabra esfuerzo es la idea de agonizar. Vamos a agonizar juntos por la fe del evangelio.
Pablo tenía un amor especial, respeto y aprecio por la iglesia de Filipo. Era una de las iglesias mas maduras descritas en el Nuevo Testamento. Sin embargo, sus miembros tenían algunos problemas, algunos de ellos potencialmente graves. Al igual que todas las iglesias de cada edad, necesitaban estar en guardia contra los falsos maestros (3:2) y repudiar a los de la congregación que eran "enemigos de la cruz de Cristo" (3:17-18). El apóstol sabía que no tardaba mucho ni siquiera en que una iglesia fiel se deslizara en la indiferencia y finalmente en error moral y doctrinal.
Conjuntar no sólo avanza la fe del evangelio, sino que también parada el avance de lo que se opone. La iglesia siempre ha enfrentado un mundo hostil. Alguna hostilidad es obvia y directa, como la de ateos, filósofos humanistas y otras religiones. Sin embargo, gran parte de la hostilidad es indirecta y sutil, que a menudo es más peligrosa. La falsa enseñanza ha encontrado su camino a las iglesias que fueron bíblicas y evangélicas. Proponentes de falsos evangelios, cualquiera que sea la forma, “como también las otras Escrituras, para su propia perdición.” (2 Pedro 3:16), así como a la destrucción de quienes engañan.
Por eso es tan importante que todos trabajemos juntos y crezcamos juntos por el bien del evangelio.
V28-29
y en nada intimidados por los que se oponen; que a ellos ciertamente es indicio de perdición, pero a vosotros de salvación, y esto de Dios. Porque a vosotros es concedido por Cristo, no sólo que creáis en Él, sino también que padezcáis por Él,
Pablo alentó a los creyentes Filipios a no alarmarse en modo alguno por sus oponentes. Alarmado es “pturo” en el griego, un verbo usado aquí en el Nuevo Testamento. No necesariamente significaba un susto abyecto, como sugeriría la expresión "aterrorizada". Pero se refería a una grave y temible preocupación. Se usó de un caballo sorprendido que se escapó, a menudo por algo perfectamente inofensivo, y lanzó a su jinete. Los cristianos en el día de Pablo, incluidos los de Filipo, a menudo tenían una buena razón humana para estar aterrorizados por posibles palizas, encarcelamiento e incluso ejecutados por oponentes del evangelio. Otros enfrentaban oponentes algo menos graves: miembros de la familia, amigos y vecinos que ridiculizaban y repudiaron. Pero por grave que sea su conflicto, no se alarman, porque el hecho mismo de que fueron atacados por el evangelio era prueba de que sus oponentes se dirigían a la destrucción. Pero también era una señal de la salvación eterna de los creyentes. Ambos signos son de Dios, el primero en marcar a sus enemigos, el segundo en marcar a sus hijos. De igual manera, Paul alentó a los fieles Tesalónicos diciendo: “Sabiendo, hermanos amados de Dios, vuestra elección; porque nuestro evangelio llegó a vosotros no sólo en palabra, sino también en poder, y en el Espíritu Santo, y en plena certidumbre; como bien sabéis qué clase de hombres fuimos entre vosotros por amor a vosotros.” 1 Tes. 1:4-5.
Los oponentes del evangelio dan dos pruebas que demuestran contra ellos y contra los creyentes.
1. Primero, el signo muestra que los enemigos de Dios y de Su pueblo están bajo Su severo juicio.
2. La segunda cosa que este signo da pruebas es la salvación de aquellos que sufren hostilidad de los oponentes del evangelio.
Cuando llegas al lugar donde Él te deja sufrir, has llegado- es la voz de Cristo Jesucristo.
V30
teniendo el mismo conflicto que visteis en mí, y ahora oís está en mí.
el mismo conflicto que visteis en mí se refiere a la oposición y persecución hostiles que él y Silas enfrentaron cuando fueron encarcelados en Felipo (Hechos 16:16-40). Y ahora escuchar estar en mí se refiere, por supuesto, a la actual prisión del apóstol en Roma, que ya ha mencionado en los versículos 12–18.
Es el mandato de la iglesia ser firme, compartir, luchar, sufrir por el bien del Señor Jesucristo. Es para esto que hemos estado destinados.
1 Tes. 3:3
para que nadie se inquiete por estas tribulaciones; porque vosotros sabéis que nosotros estamos puestos para esto.
Pablo sabía lo que era sufrir por Cristo. El sufrimiento por Cristo es una muestra de bendición, no una señal de que Dios ha dado la vuelta a su cara.
Conclusion:
Con esto concluye el capítulo 1 en el que hemos visto la filosofía de la vida cristiana. El capítulo se resume en un versículo: “para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia.”
Vamos Orar:
Padre, gracias por este estudio a lo largo del primer capítulo de Filipenes. Ha sido una gran bendición para mí y espero que haya sido para tu iglesia también. Ayúdenos a recordar estas verdades y ponerlas en práctica en nuestras vidas. En el nombre de Jesús, amén.