De Pastor a Pastor
Instalación Pastoral de Juan Rivera Cedeño • Sermon • Submitted
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Olor a ovejas
Olor a ovejas
y os daré pastores según mi corazón, que os apacienten con ciencia y con inteligencia.
Juan, te ha tocado pastorear en un tiempo de grandes desafíos. En una sociedad donde hay muchos caminos de espiritualidad, pero con una sola verdad cristiana que enfatiza que Jesús es el camino. El ajetreo administrativo es amplio en este tiempo contemporaneo.
Para ello Dios llama pastores según su corazón.
Ese pastor según el corazón de Dios tiene “olor a oveja”. Ese olor está impregnado, más allá de la ropa, en el corazón.
Por ello, recuerdo aquella experiencia de Jesús resucitado con Pedro, a orillas del lago de Tiberias, porque allí estaba Pedro con una mezcla de emociones y me atrevo a pensar que triste y sobre todo desanimado. Jesús se le acerca y le pregunta: ¿Pedro, me amas? Luego de la respuesta de Pedro, Jesús le ordenó: “apacienta mis ovejas”. Y volvió a preguntarle: “Simón, hijo de Juan, ¿me amas? Sí, Señor, tu sabes que te quiero”. Luego el Señor le dijo: Cuida de mis ovejas.
Volvió a decirle la segunda vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Le dijo: Pastorea mis ovejas.
Creo que el Señor no le echó en cara la pasada negación, sino señalándole que a pesar, de su tropiezo, aún contaba con su intimidad y amor.
Ese amor tenía que brotarle del corazón que es según Dios. Dicho de otra manera, muéstrame que me amas, cuidando, guiando y alimentando mi rebaño.
Sin duda, en esta época de desafíos y crisis universal de liderazgo, necesitamos recapturar y atesorar los pastores conforme al corazón de Dios.
Hoy que muchos son atraídos al ministerio pastoral por motivaciones incorrectas, seducidos por olores autogratificantes de posiciones y grandezas (egoísmo), por los deseos casi adictivos de reconocimiento y renombre (vanagloria), el aprovechamiento económico incorrecto (lucro), ansias de poder, contro y autoridad, ante ellos debemos y necesitamos recordar una pastoral dada por Dios y conforme a su corazón.
Los aires de superioridad y autopromosión son actitudes que lesionan el ministerio pastoral y afectan el servicio y el bienestar de las ovejas.
Aquí se trata del reino de Dios y no el nuestro.
La vida pastoril es desde tiempos inmemorables una realidad.
Después dio a luz a su hermano Abel. Y Abel fue pastor de ovejas, y Caín fue labrador de la tierra.
La Escritura es frecuente e insistente en la analogía entre pastor y ovejas para representar la relación de intimidad. En el Nuevo Testamento, la palabra apacentar tiene la misma connotación que pastorear.
Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre.
Ser vs hacer
Ambos son necesario sin dejar de ser. Ese momento en que Marta quiso hacer para impresionar a Jesús, que la puso histérica y nerviosa, provocó una queja contra su hermana. Nunca dejaremos de hacer, pero lo que marcará tu pastoral será la actitud que tomes frente a la presencia del Señor.
No te obseciones y seas absorvido por la burocracia administrativa de la obra, que olvides el contacto con las ovejas. Que el estar preocupado por lo secundario que olvides la prioridad de la cercanía de las almas. Ejercer funciones pastorarles no es lo mismo que ser pastor. El ser jamás permitirá que pierdas la esencia de nuestra vocación.
Nos quemamos
La metodología administrativa es necesaria, pero hay que tener cuidado porque puede ser adictiva. Tu busqueda de Dios en oración y estudio de la Palabra nunca permitirá que tu pan sea viejo en el altar. Toda palabra predicada debe ser vitalidad espiritual porque de lo contrario no es palabra.
Nunca descuides la Palabra - delegar es parte del desarrollo de líderes.
Entonces los doce convocaron a la multitud de los discípulos, y dijeron: No es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios, para servir a las mesas.Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo.Y nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra.
Ahí descubriremos la unción y la gracia de Dios para desarrollar el trabajo.
Cada abrazo, como dice mi esposa, tuyo es una terapia Juan. Tú no eres de los que hace formalista y fría tu trato con las ovejas provocando un despegue emocional y afectivo. Tus abrazos Juan son impregnados de amor pastoral y luego tú hueles a ovejas.
No se trata de compartir con las ovejas la última revelación de Dios, sino la rica y efectiva Palabra de Dios. Nunca caigas en el círculo vicioso del sensacionalismo para fama, busca siempre la salud espiritual de las ovejas. Nunca pretendas llenar expectativas humanas, siempre procura llenar las de Dios.
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