Yo prometo proveerte.

Renovación de votos con la iglesia  •  Sermon  •  Submitted
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Así como en el matrimonio el esposo es el proveedor del hogar, el miembro es el proveedor de la iglesia.

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¡Imagínese un salón de consejería! El consejero o pastor está aconsejando a una pareja.
- El marido dice “mi mujer dice que ya no quiere seguir conmigo y yo no se que hacer. ¡Yo no la quiero perder!”.
La señora, quien es es la que se está quejando de su esposo, dice:
- “No, dile la verdad, dile lo irresponsable que eres, ¡sinverguenza!”.
“Esto es lo que pasa Pastor: el nunca está en casa, ¿Quién es la que tiene que lidiar con los niños todo el tiempo? ¡Yo!, ayudarles a hacer sus tareas, ¡Yo!, ir a las funciones en la escuela, ¡Yo! Y aparte de eso tengo que trabajar porque él apenas da para la leche; de vez en cuando aparece con un par de libras de frijoles, Ah, pero sus gustitos no le faltan. Yo tengo que pagar la renta, el agua, la luz, la ropa, y la comida. Y todavía se queja si no le doy de comer bien. ¡Ya me cansé, Pastor! ¡Ya son varios años así!
Y si le pido que me dé más dinero, me sale con el cuento que no tiene, que gana poco, y que no le alcanza. Pero Pastor: Si no tiene, ¿De donde saca para salir a comer con sus amigos, para pagar por ver las pelea, y para comprar cosas que a él le gustan, pero que no necesitamos? Ya le dije que así no podemos seguir juntos. Así, ¿de que me sirve tener marido? ¡Que se vaya y que vea si se halla otra que lo mantenga! Pero yo, ¡ya no!
Si usted fuera el consejero, le pregunto: ¿Tiene razón la mujer?
En las bodas de antes, las arras era un elemento común . Las arras se refieren a una prenda o señal entregada como garantía de un contrato. En la ceremonia, el novio entregaba a la novia un número de monedas doradas, lo cual simbolizaba el compromiso que él estaba adquiriendo de proveer lo necesario para ella y el hogar; símbolo de la promesa de provisión.
La unión matrimonial se asemeja a la unión de una persona (el novio) a la iglesia (la novia). Y hay una gran similitud entre los votos hechos a la novia y los hechos a la iglesia.
Leer Efe 5:28-29
Ephesians 5:28–29 LBLA
Así también deben amar los maridos a sus mujeres, como a sus propios cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama. Porque nadie aborreció jamás su propio cuerpo, sino que lo sustenta y lo cuida, así como también Cristo a la iglesia;
eph 5:28-29
Pongan atención a esta frase “la sustenta” (nutre, alimenta, provee el alimento). Eso es parte de la provisión.
La semana pasada renovamos nuestro voto de proteger a la iglesia. Hoy hablaremos del voto de proveer para la iglesia. Ese voto lo cumpliremos de tres maneras.
La semana pasada renovamos nuestro voto de proteger a la iglesia. Hoy hablaremos del voto de proveer para la iglesia.
Ese voto lo cumpliremos en tres aspectos:

Estar fielmente presente con la esposa.

Provisión no solo significa dinero; incluye también presencia en la familia.
La queja de la esposa: “él nunca está en casa… aparece cuando le da la gana”.
“nunca está en casa… aparece cuando le da la gana”
Tú no puedes decir que estás comprometido con Cristo si no estás comprometido con Su iglesia. Y no puedes decir que estás comprometido con tu iglesia si no estás presente. ¿Como practicamos presencia?

Asistiendo fielmente a los servicios.

Por medio del escritor de Hebreos, Dios exhorta a los creyentes a una presencia constante en la iglesia:
Hebrews 10:25 LBLA
no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos unos a otros, y mucho más al ver que el día se acerca.
La presencia del miembro en las actividades principales de la iglesia es importante para él porque el miembro que deja de congregarse, se enfría.
Indica que ella [la iglesia] es importante.
Pero su presencia también es importante para la iglesia. Su presencia indica que para él, ella [la iglesia] es importante.
Su presencia anima a otros creyentes y, aún, a no creyentes o visitantes. La presencia contagia el deseo de participación.
Su ausencia, en cambio, desanima a los inmaduros y obviamente a visitantes. Ejem: Si un visitante, viene a uno de nuestros servicio como el Estudio Bíblico o la oración, y encuentra que solamente hay tres o cuatro “pelones”, ¿Cuál va ser su impresión? ¿Qué va a pensar? ¡Esto está muerto!
¿Qué si llega al Servicio de Adoración y encuentra que solamente 5 ó 6 están presentes a la hora de comenzar? ¿Qué le comunica eso?
¡El visitante no tendrá ganas de regresar!
Tu puntualidad anima; tu tardanza desanima. ¿Eres de ánimo o de desanimo?
El segundo aspecto de la provisión tiene que ver con proveer un ejemplo de consagración.

Proveer un ejemplo de consagración.

El marido podrá estar presente, pero si la familia lo ve bebiendo, fumando, drogándose, maldiciendo, durmiendo, y aprovechándose de la esposa, ¿De qué sirve que esté presente?
Así como la familia necesita un esposo ejemplar, la iglesia necesita miembros que vivan piadosamente.

Viviendo una vida piadosa.

1 Peter 1:15–16 LBLA
sino que así como aquel que os llamó es santo, así también sed vosotros santos en toda vuestra manera de vivir; porque escrito está: Sed santos, porque Yo soy santo.
Una vida piadosa es un testimonio a este mundo de que somos hijos de Dios. Pedro nos está diciendo que debemos ser como nuestro Padre.
La iglesia es un lugar para pecadores que han sido santificados (apartados para vivir en santidad) y que desean vivir santamente.
Somos representantes de Cristo y representantes de la iglesia. Si un marido vive pecaminosamente, está dañando a su esposa; si un miembor vive pecaminosamente; daña a su iglesia.
Por esos es que la Biblia manda a la Iglesia a aplicar disciplina a aquellos miembros que insisten en pecar.
¡Proveamos a la iglesia con un ejemplo bueno y santo!
El tercer aspecto de la provisión es llenar sus necesidades económicas.

Llenar sus necesidades económicas.

“él apenas da para la leche… de vez en cuando aparece con un par de libras de frijoles. Yo pago la renta....”
Dicho en otras palabra en no provee para las necesidades económicas del hogar.
Aunque esta sociedad nos enseñe lo contrario, la Biblia dice que la responsabilidad de proveer es del marido, no de la esposa.
De la misma manera, la responsabilidad de proveer no es de la iglesia sino del miembro. La iglesia no puede sobrevivir “si apenas das para la leche”.
Cada miembro que tiene un ingreso, debe ser responsable y proveer para llenar las necesidades de la iglesia.
¿Cómo? ¿Haciendo actividades para recaudar fondos? ¡ No!

Diezmando y ofrendando regularmente.

En la Biblia, yo encuentro dos maneras combinadas de proveer para las necesidades de la iglesia: una mandatoria y una voluntaria.
La mandatoria se llama diezmos y la voluntaria se llama ofrendas. ¡Y no debemos confundirlos! Digo esto porque los avaros tienden a querer aplicar lo que la Biblia dice acerca de las ofrendas a lo que dice de los diezmos.
En cuanto a los diezmos, el plan establecido por Dios para sustentar económicamente a la iglesia, la parte mandatoria, Dios dice:
Malachi 3:8–12 LBLA
¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me estáis robando. Pero decís: “¿En qué te hemos robado?” En los diezmos y en las ofrendas. Con maldición estáis malditos, porque vosotros, la nación entera, me estáis robando. Traed todo el diezmo al alfolí, para que haya alimento en mi casa; y ponedme ahora a prueba en esto—dice el Señor de los ejércitos—si no os abriré las ventanas del cielo, y derramaré para vosotros bendición hasta que sobreabunde. Por vosotros reprenderé al devorador, para que no os destruya los frutos del suelo; ni vuestra vid en el campo será estéril—dice el Señor de los ejércitos. Y todas las naciones os llamarán bienaventurados, porque seréis una tierra de delicias—dice el Señor de los ejércitos.
¿Recuerdas el significado de sustentar? Proveer el alimento, nutrir, alimentar. ¿Lo ves en estos versículos? ¿Dónde?
El beneficio es doble: Dios promete bendecirte abundantemente; y la iglesia no tendrá necesidad.
Y en cuanto a las ofrendas, la parte voluntaria, Dios las diferencia de los diezmos, y dice:
Deuteronomy 12:6 LBLA
Y allí traeréis vuestros holocaustos, vuestros sacrificios, vuestros diezmos, la contribución de vuestra mano, vuestras ofrendas votivas, vuestras ofrendas voluntarias, y el primogénito de vuestras vacas y de vuestras ovejas.
Cuando el templo construido, en adición a los diezmos, David y el pueblo dieron ofrendas voluntariamente:
1 Chronicles 29:17 LBLA
Sabiendo yo, Dios mío, que tú pruebas el corazón y te deleitas en la rectitud, yo he ofrecido voluntariamente todas estas cosas en la integridad de mi corazón; y ahora he visto con alegría a tu pueblo, que está aquí, hacer sus ofrendas a ti voluntariamente.
1 Chr 29:17
Durante el tiempo de Esdras, para reconstruir el templo, de igual manera, en adición a los diezmos, dieron ofrendas voluntarias:
Ezra 2:68 LBLA
Y algunos de los jefes de casas paternas, cuando llegaron a la casa del Señor que está en Jerusalén, hicieron ofrendas voluntarias en la casa de Dios para reedificarla sobre sus mismos cimientos.
Ezr
En el N.T., cuando habían hermanos en necesidad, otros daban ofrendas voluntarias para ayudarles:
2 Corinthians 9:7–8 LBLA
Que cada uno como propuso en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al dador alegre. Y Dios puede hacer que toda gracia abunde para vosotros, a fin de que teniendo siempre todo lo suficiente en todas las cosas, abundéis para toda buena obra;
2 cor 9:7-8
¡Seamos responsables, hermanos! ¡Proveamos para las necesidades de la iglesia! ¡Cumplamos con nuestra promesa de proveer!
Si tu eres miembro de esta iglesia, tu hiciste esa promesa cuando firmaste tu solicitud de membresía. ¡Cumple lo que prometes!
¿Estás dispuesto a renovar tu voto de provisión?
Yo, _______ me renuevo mi voto con esta iglesia de proveer para sus necesidades, tanto espirituales como económicas, por medio de mi consagración a Dios y por medio de mis diezmos y ofrendas.
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