Columna y Baluarte de la Verdad
La Iglesia • Sermon • Submitted • Presented • 1:02:50
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· 177 viewsEl humanismo, es una filosofía de vida que ensalza el valor del hombre y se apoya en la racionalidad humana como medio para entender el mundo. Rechaza la existencia de Dios como autoridad suprema y encumbra o levanta al hombre en su lugar.
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14 Esto te escribo, aunque tengo la esperanza de ir pronto a verte,
15 para que si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad.
16 E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne, Justificado en el Espíritu, Visto de los ángeles, Predicado a los gentiles, Creído en el mundo, Recibido arriba en gloria.
1 Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios;
2 por la hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia,
3 prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de alimentos que Dios creó para que con acción de gracias participasen de ellos los creyentes y los que han conocido la verdad.
INTRODUCCIÓN
INTRODUCCIÓN
Tras la revolución francesa de 1789, comenzó un período de cambios y reformas caracterizado por una brutal represión por parte de los revolucionarios hacia todo lo que recordara al régimen anterior. Durante este período, conocido como el “Terror”, se llevó a cabo una serie de reformas económicas, sociales y religiosas que dieron como resultado una imposición del humanismo frente al cristianismo.
Se confiscaron los bienes de la nobleza y del clero, se decapitó a 1300 personas contrarias al nuevo régimen y muchas iglesias fueron convertidas en almacenes o templos de la “Razón”.
Cuando la Madame Roland, antigua partidaria de la revolución se atrevió a criticar los abusos que se estaban llevando a cabo, fue sentenciada a muerte y, antes de ser guillotinada, se inclinó ante la estatua de la libertad, actual plaza de la Concordia y pronunció sus célebres palabras: “Oh Libertad, ¡cuántos crímenes se cometen en tu nombre!”
Así la sociedad francesa fue rechazando las ideas tradicionales sobre Dios para alzar la bandera del humanismo como valor de fe y conducta. Desde entonces el hombre destronó a Dios solo para entronarse a sí mismo.
Lo mismo ocurrió en Inglaterra y por años ha estado ocurriendo en este país.
El humanismo ha creado una sociedad que rechaza a Dios, a Cristo y su Palabra, una sociedad que a lo bueno dice malo y a lo malo dice bueno.
El humanismo, es una filosofía de vida que ensalza el valor del hombre y se apoya en la racionalidad humana como medio para entender el mundo. Rechaza la existencia de Dios como autoridad suprema y encumbra o levanta al hombre en su lugar.
Lo que ha dado como resultado el detrimento, el daño o el deterioro las sociedades modernas en todos los aspectos. Social, político, económico y religioso.
En el día de hoy quisiera comenzar este año con este mensaje antiguo, pero con una gran repercusión e importancia para esta generación moderna y endiosada.
En nuestro texto Bíblico leímos que la Iglesia de Dios es Columna y Baluarte de la verdad y me gustaría que observemos lo que dice el texto.
COLUMNA Y BALUARTE DE LA VERDAD
COLUMNA Y BALUARTE DE LA VERDAD
14 Esto te escribo, aunque tengo la esperanza de ir pronto a verte,
15 para que si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad.
En primer lugar, notamos que Pablo tenía la esperanza de visitar a Timoteo pronto. Y habiéndole dicho esto, él apóstol prosigue diciendo; si su visita se retrasa por alguna razón que no menciona. Él le deja saber a Timoteo la razón por la cual escribió estas cosas que anteriormente ha dicho.
Timoteo debe saber como debe conducirse en la Iglesia. Timoteo era un joven y además pastor de la Iglesia de Efeso y Pablo le esta dirigiendo esta carta recomendándole como debe conducir el ministerio de la Iglesia por eso leemos muchas instrucciones que tienen que ver con la Iglesia.
Luego en ese mismo texto Pablo describe a la Iglesia como Columna y Baluarte de la Verdad. Note que Pablo dice que la Iglesia local es el sistema de soporte de la verdad.
El humanismo no es columna ni baluarte de la verdad, tampoco lo es el panteísmo, o el estoicismo moderno fundado en las enseñanzas de Aristoteles, Platon, Sócrates o Maquiavelico.
Es la Iglesia. La Iglesia es columna y baluarte de la verdad.
Otras traducciones utilizan los términos Pilar para columna y sostén o fundamento para baluarte. Todos los términos tienen la característica de arquitectura.
El baluarte es el fundamento y la columna es una estructura de soporte.
De manera que la fundación y el soporte de la verdad en esta era es y siempre ha sido la Iglesia de Cristo. La organización exclusiva de Dios que obra en esta dispensación de la historia.
Dios usó a la Iglesia para la transmisión y la preservación de Su Palabra, y la Iglesia es desde entonces el sistema de soporte de la verdad, la Palabra de Dios y la herramienta que Dios utiliza para hablar a los hombres.
10 para que la multiforme sabiduría de Dios sea ahora dada a conocer por medio de la iglesia a los principados y potestades en los lugares celestiales,
Entonces, estas palabras enfatizan el papel de la iglesia en la proclamación de las enseñanzas básicas de la fe cristiana y en protegerla y defenderla de los falsos maestros de los postreros días.
El humanismo desde sus inicios ha rechazado a Dios, el estoicismo es un sistema filosófico humanista centrado en el hombre, no en Dios.
Pero me gustaría resaltar en estos últimos minutos un ismo que nos esta afectando a todos de una manera increíble. Me refiero a:
EL INDIVIDUALISMO
EL INDIVIDUALISMO
Vivimos en los tiempos de la exaltación de la libertad personal que se acerca a lo absurdo. Relaciones familiares naturales que toda sociedad durante toda la historia ha honrado hoy son entregados antes el libertinaje libre del homosexualismo, bisexualismo, y otras formas de libertinaje que ha colocado el matrimonio como una institución anticuada.
Aún en las sociedades que practicaban el homosexualismo (como la Roma antigua) el matrimonio todavía era reconocido y protegido. Hoy por primera vez en la historia se quiere definir el matrimonio como cualquier conjunto de seres vivos. Tanto que casarse con una planta que es ser vivo se puede considerar un matrimonio.
La sociedad moderna está ebria con poder “escoger” algo nuevo. Sólo la idea de poder escoger libremente lo que uno quisiera emociona las masas.
La inmensa creatividad de los promotores de productos nos hace creer que cada cosa “nueva” realmente es algo nuevo, aunque sea solamente el empaque, el color o la forma.
Borrachos estamos con la superficialidad de querer algo novedoso, no importa qué sea.
Como niños que quieren un juguete nuevo, y después de diez minutos se aburren y buscan otro, así está el mundo entero.
En el ámbito de la religión no ha escapado. En lugar de abrazar su fe como ancla.
19 La cual tenemos como segura y firme ancla del alma, y que penetra hasta dentro del velo,
O en lugar de abrazar a Dios como si fuera, (que lo es) lo más importante en la tierra
25 ¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti? Y fuera de ti nada deseo en la tierra.
O en lugar de abrazar a su Iglesia como columna y baluarte de la verdad, los cristianos hemos reducido nuestra fe a otra opción entre todas las demás opciones de la vida.
La religión se ha vuelto otro producto de elegir.
¿Cuántos cristianos que usted conoce todavía están en la iglesia en que nacieron? ¡Muy pocos! A menos que viven en lugares rurales donde no hay otra opción, la mayoría han pasado de iglesia en iglesia buscando un mejor producto.
No estamos buscando “la verdad”. Estamos buscando un producto que me complazca como los otros productos me complace: me hacen sentirme bien.
La raíz de esta sed de la libre elección de productos nuevos para satisfacerme es el individualismo extremo.
No buscamos una verdad absoluta que rige tanto para nosotros como para nuestros hijos, nuestros vecinos, y todos los pueblos. Ni creemos que exista tal verdad absoluta.
Es tan grave el problema que algunos no conocen y pareciera no importarles lo que dice la Biblia.
No es de sorprenderse entonces, que muchos de nosotros cristianos, estamos abandonando la Iglesia de Dios, la columna y baluarte de la verdad, por otras religiones o filosofías que funcionan mejor, o están mezclando prácticas y creencias extrañas al cristianismo neo-testamentario, en un sincretismo mundano semi-pagano.
El individualismo ha sido efectivo en desangrar la Iglesia de su vitalidad. Cortó su tendón de Aquiles, castró su virilidad, socavó su fundamento, y el cascarón que ha quedado es nada más la fachada de su anterior gloria.
¿Quién tomará o quién toma a la Iglesia en serio en el día de hoy?
Los políticos la desprecian, los consumistas la explotan, los vivazos la utilizan. Y los cristianos individualistas frecuentan el culto cuando quieren, y si no van, da igual. No hace mucha falta. La Iglesia ya no es “columna y baluarte de La verdad”. Es meramente otra opción el domingo, si no se presenta alguna otra distracción.
CONCLUSIÓN
CONCLUSIÓN
Que el Señor nos ayude a corregir nuestra idea acerca de la Iglesia.
Estamos en el lado correcto de la historia y cuando Cristo, nuestra vida se manifieste el mundo sabrá a quien rechazó.
Cristiano cristiana que esta aquí, no es tiempo de andar brincando como saltamontes de un lugar a otro buscando productos que le satisfaga su deseo individualista que le hace sentir bien.
Es tiempo de abrazar a la Iglesia de Dios y verla como lo que realmente es. Columna y Baluarte de la absoluta verdad.
Este año aférrate más a Dios, conoce más de su Palabra, léela, estudiala, memorizala y haz que se convierta en la prioridad más importante de tu vida. Y no permitas que tus deseos egoístas y el humanismo te engañe haciéndote creer que no la necesitarás para vivir.
Y si hay alguien aquí que no es salvo, no es salva, no dejes que tu orgullo te haga pensar que no necesitas a Cristo.
Allí donde estás reconoce que eres un mendigo pecador que merece el castigo eterno y pídele a Cristo que te salve.
El individualismo te hace vivir confiando en ti mismo, en que eres una buena persona cuando La verdad de Dios te dice que no lo eres y que debes arrepentirte de tus pecados. Por eso allí donde estas, levanta tu mano si hoy quieres pedirle a Cristo que te salve.