Cuando las tentaciones llegan
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Introducción
Introducción
Tema: Verdades acerca de las pruebas
Dios no prueba la fe con el mal
Dios prueba la fe por la Palabra, no con las palabras del hombre
Luego de ver como debemos responder cuando las pruebas llegan, Santiago en esta sección nos muestra que no debemos culpar a Dios por las tentaciones y el pecado, sino debemos buscar fortaleza en su gracia-bondad. (coalición)
Cuando las tentaciones lleguen:
I. No culpe a Dios v. 13-18
I. No culpe a Dios v. 13-18
Suele pasar que cuando uno se encuentra xxxxx busca culpables-culpa a Dios.
Dios no es culpable de las tentaciones ¿por qué?:
Dios no tienta a nadie v.13
Aclarando: Pruebas ≠ tentaciones
Las pruebas son para tu edificación, las tentaciones son para tu destrucción.
Las pruebas producen perseverancia, las tentaciones inconstancia.
Las pruebas nos ayudan a madurar, las tentaciones te hunden.
Las pruebas deben ser aceptadas, de las tentaciones debemos huir.
En las pruebas debemos responder con gozo, en las tentaciones con la Palabra.
Las pruebas se pueden soportar, las tentaciones resistir.
Las pruebas ponen a prueba nuestra fe, las tentaciones la manchan.
Las pruebas nos llevan a la verdad, las tentaciones al engaño.
Las pruebas nos llevan a la felicidad, las tentaciones a la ruina. (1:13; 15)
Las pruebas avivan la fe, las tentaciones la matan.
Las pruebas acrisolan la fe, las tentaciones la contaminan.
Las pruebas prometen vida, las tentaciones muerte.
Las pruebas provienen de Dios, las tentaciones de la carne y del diablo.
Por tanto, Dios no tienta a nadie.
La razón por que Dios no tienta v.13b “porque Dios no puede ser tentado por el mal”
Dios es Santo -Nada malo procede de Él.
Dios obra para alejarnos del pecado, no para acercarnos al mal.
No debemos culpar a Dios por las tentaciones que sufrimos.
En segundo lugar, cuando las tentaciones lleguen, tenga en cuenta que:
II. Cada uno es tentado con su propia carne v.14-15
II. Cada uno es tentado con su propia carne v.14-15
Somos tentados por nuestra propia inclinación pecaminosa v.14
v. 14b “de su propia concupiscencia es atraído y seducido.”
concupiscencia = pasiones desordenadas. Por eso necesitamos de Cristo para ser controlados por el Espíritu Santo para que nuestros mayores deseos/pasiones sea Dios y no el pecado.
Nuestro corazón debe llenarse de las cosas espirituales (Mat 15:19 cp. Sal 119:11).
Cada uno es responsable de huir o ceder a la carne-tentación (1 Co 10:13).
Martín Lutero: “No puedo evitar que las aves vuelen sobre mi cabeza, pero si puedo evitar que hagan nido en el”
La tentación siempre llegará, pero es responsabilidad de cada uno resistir, rechazar o huir.
Etapas de la tentación v.15
Tentación, todos somos tentados internamente (deseos pecaminosos) o externamente (diablo, el mundo).
Concebir, ceder a la tentación.
Da a luz el pecado,
Muerte, consecuencia.
Cuando las tentaciones lleguen, también debes recordar que:
III. De Dios viene todo lo que es bueno v.17-18
III. De Dios viene todo lo que es bueno v.17-18
Es un engaños creer que Dios tienta o que es responsable de nuestras tentaciones. v.16
En cambio, Dios es dador de buenas dádivas/regalos v.17
Es una razón más para no ceder a la tentación.
Dios siempre obra para beneficio de sus hijos y no cambia.
De Dios viene la bendición de la salvación v.18
Somos salvos por la Palabra, por medio de la fe (Ef. 1:13)
Cuando nacemos de nuevo somos capacitados para resistir y vencer las tentaciones.
Cuando las tentaciones llegan:
IV. Debemos ser hacedores de la Palabra v.19-27
IV. Debemos ser hacedores de la Palabra v.19-27
Para ser hacedores de la palabra debemos primero recibirla
¿Cómo debemos recibir la palabra?
Con humildad v.19-21
Con prontitud v.22-25
Sin negligencia v.23-24
Cuando la ponemos en práctica con prontitud trae bendición. ¿quiere ser bendecido por Dios, ponga en práctica la Palabra de Dios!!
Con autenticidad v.26-27
Aplicación
Aplicación
En medio de las tentaciones, recurra a Dios.
Difunda la gracia salvadora de Dios.
Practiquemos la palabra