QUE NADIE TE ENGAÑE (MARCOS 13:3-8)

Evangelio según San Marcos  •  Sermon  •  Submitted   •  Presented
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1 SIEMPRE HABRÁ QUIEN QUIERA ENGAÑARTE
2 EVITANDO EL ENGAÑO
INtro
Seguimos con esta serie del Evangelio según san Marcos.
Habíamos dejado al Señor saliendo del templo, y los discípulos admirando el templo, Jesús mostró su autoridad por encima del templo, siendo Él, el Dios del templo.
Predijo la destrucción del templo, porque todo en este mundo pasará, menos su Palabra.
Ahora nos encontramos a los discípulos preguntando cuando sucederá esa destrucción.
Aquí no sólo están hablando de la destrucción del templo también de la consumación del tiempo, de las señales antes del fin…
Pero, ¿que es el fin de los tiempos? Es el tiempo que transcurre entre la ascensión del Señor a la venida del Señor.
y sobre esto ha habido siempre muchas especulaciones extrabíblicas, muchos se levantan buscando notoriedad y confundir a la gente. Pero ¿qué nos dice Cristo? ¿que nos alerta el Señor? ¿qué podemos aprender este pasaje? Porque muchos querrán engañarnos...

1. SIEMPRE HABRÁ QUIEN QUIERA ENGAÑARTE

Debemos tener cuidado, siempre habrá quien te quiera engañar, la filosofía del mundo lo trata de hacer constantemente.
También tu carnalidad y tu falta de fe.
También falsos maestros que se levantan.
a) Las advertencia de Cristo.
¡Mirad que nadie os engañe!
Esto es lo que advierte Cristo a Pedro, Jacobo, Juan, Andrés, pero también te lo advierte a ti.
El templo será destruido, y así fue en el 70 d. C. Esto ya lo vimos en el anterior sermón.
Pero aquí Jesús no sólo se fija en este acontecimiento, sino que va enseñar lo que acontecerá en los últimos tiempos.
Y habrá varias cosas a tener en cuentra, pero por encima una principal que vamos a ver después.
b) Las veces que se han levantado falsos Cristos y lo seguirán haciendo.
Marcos 13:6 LBLA
6 Muchos vendrán en mi nombre diciendo: «Yo soy el Cristo», y engañarán a muchos.
Hoy estamos viendo la alerta de aquellos que pretenderán engañarte, que hasta se harán llamar evangélicos, evangélicos de sana doctrina, que te dieran lo que quieres escuchar, pero, te estarán queriendo desviar de Cristo. Para que los admires a ellos.
Ellos utilizaran infelizmente el nombre de Dios para engradecerse ellos, pero ellos tomaran jucio.
Nosotros somos advertidos para que tengamos cuidados de estos.
2 Timoteo 4:3–4 LBLA
3 Porque vendrá tiempo cuando no soportarán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oídos, acumularán para sí maestros conforme a sus propios deseos; 4 y apartarán sus oídos de la verdad, y se volverán a mitos.
Y tratarán de engañarte con asuntos grises.
c) Profetizarán el fin por cualquier cosa buscando notoriedad.
Marcos 13:6–8 LBLA
6 Muchos vendrán en mi nombre diciendo: «Yo soy el Cristo», y engañarán a muchos. 7 Y cuando oigáis de guerras y de rumores de guerras, no os alarméis; es necesario que todo esto suceda, pero todavía no es el fin. 8 Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá terremotos en diversos lugares; y habrá hambres. Esto solo es el comienzo de dolores.
Desde que Cristo ascendió y está sentado a la diestra del Padre, en lo que se conoce como en los últimos tiempos, se ha vivido esto.
Siempre se ha pensado y ha habido persona que se han levantado como iluminados queriendo declarar el fin de los tiempo, diciendo «yo soy el ungido» el profeta del Señor.
Cuandos e rondaba el año 1000 en la edad media se pensaba que Cristo venía.
Después por cualquier calamidad se piensa que es el fin. Y esto pasa mucho entre evangélicos también.
A veces nos obsesionamos y nos dejamos engañar por esta obsesión.
¿Pero qué nos está diciendo Jesús?
Evita el engaño…

2. EVITANDO EL ENGAÑO.

Vamos a ver ahora de que manera podemos evitar ser engañad, y tomar en serio esta advertencia de nuestro Señor.
Lo primero que tenemos que hacer es:
a) Escuchar el consejo del Señor por medio de las Escrituras. (diapositiva)
Precisamente esto es lo que hicieron los discípulos.

5 Y Jesús comenzó a decirles: Mirad que nadie os engañe.

6 Muchos vendrán en mi nombre diciendo: «Yo soy el Cristo», y engañarán a muchos.

Las Escrituras marcaran el filtro de lo verdadero y lo falso. Por eso debemos escuchar.
¿Cómo escuchamos? Leyendo…
Los cristianos debemos tener una vida con la Biblia.
Como decía Spurgeon: Visita buenos libros pero vive en la Biblia. Como veremos después.
Por lo tanto:
b) No sólo escuchar, sino permanecer inamovible en las Escrituras. (diapositiva)
El hecho que ya estemos escuchando la voz del Señor, nos debe dirigir a la permanencia inamovnble de las Escrituras.
Hoy se levantan muchos flasos profetas dentro del cristianismo, sectas que hace que uno se confunda como no tenga claro donde debe estar su corazón y cual es la autoridad suprema, las Escrituras.
Otros hacen que por medio de las filosfias de este mundo se comporten como falsos profetas, queriendote confundir, con nuevas ideologías abominables y que son totalmente anti Dios.
También por medio de la falsa ciencia, queriendo contradecir a las Escrituras.
En todo esto abarca estos falsos Cristos, que son realmentes antiCristos.
Por eso, cuidado… No sólo debemos esuchcar sino permanecer…
Como hacían los bereanos.
Hechos de los Apóstoles 17:10–12 LBLA
10 Enseguida los hermanos enviaron de noche a Pablo y a Silas a Berea, los cuales, al llegar, fueron a la sinagoga de los judíos. 11 Estos eran más nobles que los de Tesalónica, pues recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando diariamente las Escrituras, para ver si estas cosas eran así. 12 Por eso muchos de ellos creyeron, así como también un buen número de griegos, hombres y mujeres de distinción.
Pero vamos a un paso más…
c) No sólo permanecer, sino que también, practicar las Escrituras (vivir las Escrituras) (diapositiva)
Como hemos dicho antes, el cristiano debe vivir la Biblia, debe ser un testimonio vivo de la Palabra de Dios, para esto debemos empaparnos de ella, debemso caminar en ella. Debemos sumergirnos.
No podemos perder el contacto con la voz de DIos, esta es las Escrituras. No por casualidad la Reforma nos da la Sola Scriptura, esta como máxima autoridad.
Como decía Lutero: «Pueden llover milagros pero si esta no encuendra con las Escritura, es falso» Porque Dios nos ha dado lo que debemos saber para vivir en ella…
Deuteronomio 29:29 LBLA
29 Las cosas secretas pertenecen al Señor nuestro Dios, mas las cosas reveladas nos pertenecen a nosotros y a nuestros hijos para siempre, a fin de que guardemos todas las palabras de esta ley.
Y viviendo en las Escrituras:
d) Estando siempre preparado sabiendo que sólo Dios conoce el final de este parto. (diapositiva)
El final será como un parto, puede que proceso duela, pero el final será glorioso.
Porque hermanos, estamos en el final de los tiempos desde que Cristo ascendió, hace ya 2000 años, por eso, no debemos obsesionarnos con lo periférico de la escatología, es decir, de los tiempos finales…
Debemos enfocarnos en loq ue realmente importan y el Señor nos ha dicho. Que Él ha vencido al mundo…
Y Nada en absoluto—ni siquiera el Hades—puede prevalecer contra la iglesia. La iglesia está segura porque es lo que Cristo llama “mi iglesia”.625
Por eso, deberíamos ser más sabios. Incluso en un pasaje lleno de imágenes escatológicas como este, el mensaje no es calcular cuándo llegará el fin, sino estar alerta y preparados para él, viviendo una vida de preparación espiritual.
Si os dais cuenta, los falsos cristos, se atreven a calcular la fecha del fin, esto no nos corresponde a nosotros, sino el de estar preparados, alerta, siempre en comunción con el Señor, como si Cristo viniera hoy.
Esta debe ser nuestra oración: Señor, quiero vivir como si tu viniera hoy. Esto es con santidad, pero tmabién con gozo.
Y no nos obsesionmo con la fecha… Pues la profecia de Cristo se cumple a través de los siglos, y ya lleva siglos pasando.
Esta profecía se cumple a través de los siglos: “se levantará en armas nación contra nación, y reino contra reino” (v. 8a). Cierto autor contó hasta trescientas guerras en Europa durante los últimos trescientos años. Y esas guerras han ido aumentando en intensidad. Es perfectamente claro que cuando se escoge cualquier guerra en particular a modo de ayuda para los “fijadores de fechas”, otra “falsa señal” se ha producido.
Hermanos, debemos tomar valentía y permamnecer firmes en el Señor, sin esucchar a los falsos crsitos, para que nadie nos engañe,
Si, viviremos persecuciones, sufriremos incluso la muerte, pero permaneciendo en el Señor bajo su autoridad de la Palabra, como decía Tertuliano: seguid adelante, despedazadnos, torturadnos, haced polvo de nosotros: nuestros adeptos acrecentarán en la misma proporción que nos arraséis. La sangre de los cristianos es su semilla”
CONCLUSIÓN.
No te dejes engañar, no te de dejes envolver con las falsas enseñanzas y predicciones de los flasos cristos, de los falsos profetas.
No te obsesiones con el entorno, pues aunque se levanten nación contra nación, Cristo nos guarda para la vida eterna. En Cristo nuestra alma está segura aunque nuestro cuerpo desfallezca.
En Cristo tenemos seguridad, y la certeza que viviremos en la eternidad en la presencia del Dios.
Por eso, cuando sucedan acontecimiento, recuerda este mensaje de alerta y que no te engañe el iluminado de turno, acude a la Palabra.
¡Estate siempre preparado! Porque como al igual, Dios no nos reveló la fecha de neustra muerte, tampoco lo hará con la del regreso de Crsito, pero lo que si tenemos por certeza, que la muerte es tan verdadera como su regreso, para que vivamos en nuestra morada eterna, junto con aquellos seres queridos cristianso que ya se nos adelantaron.
Por eso, confía solamente en el Señor.. y vive para Él.
QUe Dios bendiga su Palabra.
ORACIÓN FINAL.
Dios Padre celestial, concedenos la sabiduría para que vivamos en tu Palabra, que esta sea nuestro escudo para que nadie nos engañe con falsas doctrinas e ilusiones. Ayúdanos, Rey eterno, por medio del Espíritu Santo a que siempre estemos llenos de ti y que vivamos con la alerta que tu Hijos nos enseñó en este pasaje. Esto te lo pedimos, por Jesucirsto, tu Hijo, Nuestro Señor, que vive y Reina por los siglos de los siglos, amén.
Que la Gracia del Señor Jesucristo, el amor del Padre y la comunión del Espíritu Santo sea con todos vosotros. Amén. ¡Bendigamos al Señor! ¡Demos gracias a Dios!.
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