Julio 2023 Semana 3 de Oración

Meditaciones para la Reunión de Oración  •  Sermon  •  Submitted   •  Presented
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ACCIÓN DE GRACIAS

Contexto:

Es un salmo de gratitud y su estructura es un Quiasmo.

quiasmo n. m. LIT Figura retórica de construcción que consiste en una repetición e inversión del orden de palabras: los versos gongorinos, “Cuando pitos, flautas,/cuando flautas, pitos”, es un ejemplo de quiasmo sencillo.

Los versos del 4-9 tienen relación con el 33-42.
Al pueblo de Israel lo rescató Dios del desierto.

1. ¿Por qué fue Israel a vagar al desierto?

Cuando salieron de la tierra de Egipto, más o menos 2 años después, enviaron unos espías a la tierra de Canaán, a donde Dios los iba a llevar a vivir en la tierra prometida. Pero el pueblo se desalentó porque vio gigantes, vio ciudades grandes y con muros altos. Y entonces leemos en (Números 14.1-4)
Números 14:1–4 NBLA
1 Entonces toda la congregación levantó la voz y clamó, y el pueblo lloró aquella noche. 2 Todos los israelitas murmuraron contra Moisés y Aarón, y toda la congregación les dijo: «¡Ojalá hubiéramos muerto en la tierra de Egipto! ¡Ojalá hubiéramos muerto en este desierto! 3 »¿Por qué nos trae el Señor a esta tierra para caer a espada? Nuestras mujeres y nuestros hijos van a caer cautivos. ¿No sería mejor que nos volviéramos a Egipto?». 4 Y se decían unos a otros: «Nombremos un jefe y volvamos a Egipto».

Vemos la agitación que el informe produjo en el pueblo: Toda la congregación gritó y dio voces (v. 1) dando crédito a los espías más que a Dios. Los que se quejan sin causa merecen tener causa para quejarse. Y esto es precisamente lo que le pasó aquel día al pueblo de Israel.

2. Por lo tanto, Dios pronuncia la sentencia contra ellos:

(Números 14.22-23)
Números 14:22–23 NBLA
22 »Ciertamente todos los que han visto Mi gloria y las señales que hice en Egipto y en el desierto, y que me han puesto a prueba estas diez veces y no han oído Mi voz, 23 no verán la tierra que juré a sus padres, ni la verá ninguno de los que me desdeñaron.
(Números 14.29-32)
Números 14:29–32 NBLA
29 ”En este desierto caerán los cadáveres de ustedes, todos sus enumerados de todos los contados de veinte años arriba, que han murmurado contra Mí. 30 ”De cierto que ustedes no entrarán en la tierra en la cual juré establecerlos, excepto Caleb, hijo de Jefone, y Josué, hijo de Nun. 31 ”Sin embargo, sus pequeños, de quienes dijeron que serían presa del enemigo, a ellos los introduciré, y conocerán la tierra que ustedes han despreciado. 32 ”Pero en cuanto a ustedes, sus cadáveres caerán en este desierto.
El pueblo se rebela ante Dios en incredulidad y vagan en el Desierto por 40 años.
Diccionario del Antiguo Testamento: Pentateuco 2. El desierto como generador teológico

Para Israel era un lugar peligroso, un lugar pavoroso porque allí no sólo se encontraron con la muerte, sino también con su Dios. Era el lugar donde por primera vez se convirtieron en una nación independiente y cohesionada, y también el lugar por el que vagaron tras rebelarse repetidamente contra Dios y contra Moisés,

El desierto es frecuentemente una soledad que llena de pavor, la verdadera imagen de la desolación (Dt. 32:10; Is. 21:1); sin embargo, el desierto también era usado como tierra de pastos (Éx. 3:1).

Diccionario del Antiguo Testamento: Pentateuco 2. El desierto como generador teológico

A través de sus encuentros con su Dios en el desierto, Israel fue formado y forjado como pueblo. Experimentó la *gracia y la salvación de Dios en ambos extremos de su travesía por el desierto, con el éxodo y la división de las aguas al adentrarse en el desierto (Ex 13:17–15:21) y la división de las aguas del Jordán y la conquista al abandonar el desierto (Jos 3–4) y entrar en la tierra.

Lema:

“Exhortación a Agradecer al Señor” Aquellos que han sido rescatados del desierto y los guió a casa.”
El Señor muestra misericordia por aquellos que hemos estado en momentos de desolación y desesperanza.

I. Primera Parte B

(Salmo 107.4-9 )
Salmo 107:4–9 NBLA
4 Vagaron por el desierto, por lugar desolado, No hallaron camino a ciudad habitada; 5 Hambrientos y sedientos, Su alma desfallecía en ellos. 6 Entonces en su angustia clamaron al Señor, Y Él los libró de sus aflicciones; 7 Y los guió por camino recto, Para que fueran a una ciudad habitada. 8 Den gracias al Señor por Su misericordia Y por Sus maravillas para con los hijos de los hombres. 9 Porque Él ha saciado al alma sedienta, Y ha llenado de bienes al alma hambrienta.
Notemos aquí las palabras que describen “carencia o debilidad”
desierto (lugar espacioso, generalmente sin pastos y sin pobladores, expuesto a peligros)
desolado (algo solo, abandonado o destruido, que causa espanto)
vagar (caminar desviado o engañado de un rumbo)
hambre y sed (la falta de lo más esencial para sobrevivir)
alma desfallecía (con angustia, debilidad, a punto de desmayar)
angustia (estar en apuros, en estrecho)
aflicciones (problemas, congojas)
Ahora se ve la acción que detona la respuesta del Señor:
¡Clamaron! = Dar un grito desgarrador; implorar; levantar la voz para quejarse; convocar.
Los libró (los salvó, los recobró estando perdidos, los arrebató de las manos del enemigo)
Los guió (dirigir o conducir por un camino)
Los sació (llenarse, satisfacción, tener abundancia)
3. ¿Qué aprendemos de esto
Que nuestros pecados nos hacen vagar y estar en el desierto, aunque a veces, también como parte de las pruebas que el Señor nos manda en medio de este mundo.
Que Dios es poderoso y fiel para ayudar a Su pueblo, aun después de castigarlo por su soberbia y rebeldía.
Que aún en la situación de mayor desesperanza y desolación, como lo es un desierto, con gran escasez, el Señor nos visita, nos libra y nos abastece de todo.
​

II Segunda Parte B

(Salmo 107.33-42
Salmo 107:33–42 NBLA
33 Él convierte los ríos en desierto Y los manantiales en secadales; 34 La tierra fértil en salinas, Por la maldad de los que moran en ella. 35 Transforma el desierto en estanque de aguas, Y la tierra seca en manantiales; 36 En ella hace morar a los hambrientos, Para que establezcan una ciudad donde vivir, 37 Y siembren campos, planten viñas, Y recojan una cosecha abundante. 38 Los bendice también y se multiplican mucho, Y no disminuye su ganado. 39 Cuando son disminuidos y abatidos Por la opresión, la calamidad y la aflicción, 40 Vierte desprecio sobre los príncipes, Y los hace vagar por un lugar desolado sin camino. 41 Pero al pobre lo levanta de la miseria y lo pone seguro en alto, Y multiplica sus familias como un rebaño. 42 Los rectos lo ven y se alegran, Pero a toda iniquidad se le cierra la boca.
Se ven las maravillas del Señor al rescatar a Su pueblo:
Convierte
Es capaz de dar y quitar
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