Pedro nos habla de Cristo
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Introducción: Los periodistas que cubren los grandes eventos políticos, sociales o culturales casi siempre buscan obtener de primera mano la opinión de aquellos que son los personajes mas importantes del acontecimiento. Buscan escuchar la voz de aquellos que están relacionados muy cerca del personaje principal del evento.
Pedro fue uno de los apóstoles más reconocidos durante el ministerio de Jesús, él no escribió un evangelio, ni nos dejo un tratado doctrinal de Cristo. siguiendo las instrucciones de su maestro...
Volvió a decirle la segunda vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Le dijo: Pastorea mis ovejas.
El escribió una carta, como pastor animó a un grupo de cristianos que sufrían por causa de Cristo, compartiendo la esperanza más gloriosa para los que creemos en él.
Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos,
Así que, he querido entresacar de su primera carta las opiniones que él tenia acerca de Jesús para determinar cuan significativo era Cristo para él. Sus palabras nos ayudaran a nosotros también a formar en nosotros una opinión mas certera, madura acerca de Jesús.
¿Que opinión tenía Pedro acerca de Jesucristo en su primera carta?
Es interesante descubrir como las expresiones que usa Pedro para referirse a Jesús, no son las de un maestro convencido de las verdades que enseña, o las de un teólogo que defiende fervientemente sus puntos doctrinales, sino la de una persona que comparte los aspectos mas significativos de su relación con su salvador.
Dios es persona, y en las profundidades de su poderosa naturaleza piensa, tiene deseos, goces, sentimientos, amor y padecimientos, como puede tenerlos cualquier otra persona. Para darse a conocer a nosotros se nos presenta como una persona. Se comunica con nosotros por medio de nuestra mente, nuestra voluntad y nuestras emociones. El intercambio continuo e ininterrumpido de amor y pensamiento entre Dios y el alma creyente, es el corazón palpitante de la religión del Nuevo Testamento.
A. W. Tozer
Veamos esas opiniones que nos habla de quien era Jesús para Pedro.
Para Pedro Jesús era:
La persona más confiable que podemos tener a nuestro lado.
La persona más confiable que podemos tener a nuestro lado.
Si yo le preguntará, Quien es la persona en quien más confía en esta vida, que me respondería?
a quien amáis sin haberle visto, en quien creyendo, aunque ahora no lo veáis, os alegráis con gozo inefable y glorioso;
Había tres cosas que Pedro creía que Cristo despertaba en el corazón de sus seguidores que confiaban en él.
Un amor lleno de confianza.
Por sus debilidades, defectos, flaquezas, el apóstol aprendió a amar a Jesús. La pregunta más importante que , por tres veces, contestó Pedro en su vida fue esta:
Le dijo la tercera vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro se entristeció de que le dijese la tercera vez: ¿Me amas? y le respondió: Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te amo. Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas.
Una fe digna de alabanza
para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo,
Pedro aprendió a confiar en Jesús cuando enfermó su suegra, cuando estaba en la tempestad, cuando Jesús era entregado, y cuando Cristo murió. Desarrollo la fe necesaria para creer que el que estaba muerto, había resucitado.
Un gozo inefable y precioso.
Que emociones despierta en usted Jesucristo?
Es por eso que quiero hacerte una primera invitación a abrir tu corazón a Jesús para que pueda amarte y puedas amarlo, a creer en Jesús para ser participe de la esperanza más gloriosa, a alegrarte de ser parte del pueblo de Dios.
Para Pedro Jesús era:
La persona más valiosa
La persona más valiosa
1 Pedro 1:19 (RVR60)
sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación,
Acercándoos a él, piedra viva, desechada ciertamente por los hombres, mas para Dios escogida y preciosa,
Cristo es el tesoro de Dios, y el deleite de Dios, y el almacén de todas las riquezas de Dios. Dios tenía ese tesoro en el cielo, pero lo envió a la tierra en el bebé de Belén. En ese Jesús que no tenía donde reclinar su cabeza, en ese Jesús como un vaso de barro, estaba ese tesoro celestial de Dios. El Jesús que bajó al sepulcro en ese vaso de barro quebrado, era el tesoro de Dios. Y Dios lo elevó a la gloria, y entonces, descendió el Espíritu Santo para poner ese tesoro celestial en nuestros corazones. Y ese tesoro en el cielo, en el que Dios se deleita, puede ser un tesoro en tu corazón, para que tú puedas deleitarte en él.
Andrew Murray
Para Pedro, Jesús era valioso porque no había nadie como él.
el cual no hizo pecado, ni se halló engaño en su boca;
Jesús era El Hijo de Dios.
Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.
Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos.
Para Pedro, Jesús era valioso por lo que solamente él pudo hacer.
quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados.
Una segunda invitación para ti es a hacer una declaración de fe que revele que tú eres un hijo de Dios.
Creo en,
Y en Jesucristo su único Hijo, Señor nuestro, que fue concebido por El Espíritu Santo, Nació de María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, Al tercer día resucitó de entre los muertos; subió al cielo; esta sentado a la diestra de Dios Padre todopoderoso; desde allí vendrá a juzgar a los vivos y a los muertos.
Para Pedro, Jesús era:
La motivación principal para la vida cristiana
La motivación principal para la vida cristiana
Cuál es el objetivo de la vida cristiana. Es la piedad nacida de la obediencia a Cristo. La obediencia desata las riquezas de la experiencia cristiana. La oración suscita y cultiva la obediencia, poniendo el corazón en la adecuada “disposición mental” para desear la obediencia.
R. C. Sproul
Para que nadie hable mal de nuestro Señor Jesucristo, obedezcan a todas las autoridades del gobierno. Obedezcan al emperador romano, pues él tiene la máxima autoridad en el imperio.
Pedro había aprendido a obedecer, no solo a amar. Había aprendido a guardar la espada, a esperar instrucciones, a ser fiel en el ministerio.
(No vayan a tomar esto de manera personal, no se lo quiero decir a alguien en especial, solamente lo quiero decir de manera especial a cada uno de ustedes: Tenemos en la iglesia muchos cristianos desobedientes)
Es por eso que en su carta nos dejo una buena lista de personas a quien obedecer.
Criados, estad sujetos con todo respeto a vuestros amos; no solamente a los buenos y afables, sino también a los difíciles de soportar.
Asimismo vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; para que también los que no creen a la palabra, sean ganados sin palabra por la conducta de sus esposas,
La siguiente invitación que quiero hacerte es a ser un cristiano obediente.
Para Pedro, Jesús era:
El ejemplo a seguir
El ejemplo a seguir
1 Pedro 2:21 (RVR60)
Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas;
Para Pedro, Jesús era su maestro, él era su discípulo.
- Pedro había sido llamado,
Andando Jesús junto al mar de Galilea, vio a dos hermanos, Simón, llamado Pedro, y Andrés su hermano, que echaban la red en el mar; porque eran pescadores.
Y les dijo: Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres.
Ellos entonces, dejando al instante las redes, le siguieron.
Pedro pasó por un proceso de formación del carácter para parecerse a Cristo.
Porque: El que quiere amar la vida Y ver días buenos, Refrene su lengua de mal, Y sus labios no hablen engaño;
Pedro pasó un proceso de formación para padecer como Cristo.
Para Pedro Jesús era:
El Príncipe de los pastores
El Príncipe de los pastores
Porque vosotros erais como ovejas descarriadas, pero ahora habéis vuelto al Pastor y Obispo de vuestras almas.
Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria.
Pedro tenía la certeza de tres cosas, acerca de Jesús como pastor:
Jesús era su buen pastor
Jehová es mi pastor; nada me faltará.
Mi pastor. El término hebreo râ‘âh que traducimos como “pastor” comprende todas las obligaciones y deberes que corresponden un buen guardián del rebaño: alimentar, guiar y defender a sus ovejas.
Charles Spurgeon
Sabía que como buen pastor Jesús había puesto su vida por él.
Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas.
Sabía que como pastor, tendría que dar cuentas de su pastoreo a Cristo.
Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre.
(Discurso de despedida de Pablo en Mileto)
Conclusión:
Conclusión:
Si tuviera que escribir una carta para alguien en una situación difícil, que dirías de Jesús en ella.
Le dirías que Jesús es la persona en que debe confiar, la persona mas importante que debe conocer, el maestro con el mejor ejemplo a seguir, el pastor que necesitas escuchar y obedecer.
Tu opinión acerca de Jesús cuenta esta ma
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