Padrenuestro: Santificado sea tu nombre

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Nuestro deber primordial en la oración es hacer caso omiso de nosotros y darle a Dios la preeminencia en nuestros pensamientos, deseos y súplicas. Glorificar el nombre de Dios es el fin último de todas las cosas.
No podemos orar correctamente a menos que la Gloria de Dios domine nuestros deseos. No debemos pedirle a Dios que nos otorgue nada que vaya en contra de su santidad.
Cuando tratamos de reflexionar sobre ellas, de manera natural surgen cuatro preguntas en nuestra mente.
¿Qué se quiere decir con la palabra santificado?
¿Qué significa el nombre de Dios?
¿Cuál es la importancia de “santificado sea tu nombre”?
¿Por qué esta petición se ubica en primer lugar?

I. ¿Qué se quiere decir con la palabra santificado?

La palabra santificado quiere decir poner aparte para un uso sagrado. Cuando decimos “santificado sea tu nombre” quiere decirse que tenemos el deseo piadoso de que el nombre incomparable de Dios sea reverenciado, adorado y glorificado. Que Dios sea tomado con sumo respeto y honor.

II. ¿Qué significa en nombre de Dios?

El nombre de Dios representa a Dios mismo, esto trae a la mente del creyente todo lo que Dios es (Sal 5:11; 20:1; Pr. 18:10). En la visión de Moisés Jehová estuvo proclamando su nombre a través de sus atributos. Por eso tiene sentido el Salmo 9:10En ti confiarán los que conocen tu nombre” (que conocen sus maravillosas perfecciones).

III. ¿Cuál es la importancia de “santificado sea tu nombre”?

Que Dios por su providencia soberana, dirija y disponga todas las cosas para su propia gloria.
Que su nombre sea santificado en y por nosotros. Esto es que ne todo lo que pidamos él sea santificado (1 Jn 5:14)
Que Dios nos permita reconocerlo y honrarlo como tal. “Nos burlamos de Dios cuando le presentamos palabras piadosas y no tenemos intención de luchar con todas nuestras fuerzas para vivir en armonía con ellas.”
Que le damos a Dios ellugar supremo, que lo ponemos por encima de todo lo demás en nuestros pensamientos, afectos y vidas (1 P. 3:15).

IV. ¿Por qué esta petición se ubica en primer lugar?

Porque proporciona la única base legítima para todas nuestras otras solicitudes. La gloria de Dios debe ser nuestro interés mayor y principal.
Cuando ofreceos esta petición a nuestro Padre celestial, estamos diciendo: “Lo que me pase, por profundo que me pueda hundir, sin importar que tan hondas sean las aguas por las cuales pueda ser llamado a pasar, Señor, engrandécete en y por medio de mí” (Jn 12:27-28)

Conclusión

Tenemos que lamentar y confesar nuestros fracasos pasados. Humillarse por esos pecados que han obstaculizado la gloria de Dios y profanado su nombre (Orgullo, frialdad, necedad, impiedad, etc.)
Debemos buscar con todas seriedad esas gracias con las cuales podemos santificar su nombre. (Mayor conocimiento, incremente de temor, mayor fe, esperanza, amor y adoración, uso correcto de sus dones).
Debemos practicar fielmente nuestros deberes. Para que no haya nada en nuestra conducta que haga que los incrédulos blasfemen su nombre (Ro. 2:24)