Que ninguno deje de alcanzar el favor de Dios.
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· 22 viewsLa importancia de valorar la posición que se tiene en Cristo y la facilidad de perderlo todo por las malas decisiones
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Pasaje: Hebreos 12.14-17
Introducción
Introducción
La herencia de mi papa?
I. La bendición de Dios a Abraham
I. La bendición de Dios a Abraham
El llamado. Genesis 12.1-3
Es bendecido con posesiones materiales: Gen. 12: 5, ver Gen 13:2, 14-15, 24:35
La promesa de un Hijo: Gen 15.1-4, Ver cap. 21: 1-5
Abraham tuvo un hijo llamado Ismael, de la esclava Agar Gen 16.
II. La bendición de Abraham a Isaac.
II. La bendición de Abraham a Isaac.
Abraham tuvo mas hijos después de Isaac e Ismael. Cap. 25.1-6
La bendición de Abraham, pasa ahora a ser la bendición de Isaac. 25.11.
La petición de Isaac contestada 25.19-21
III. ¿La bendición de Isaac a Esaú?
III. ¿La bendición de Isaac a Esaú?
La bendición debía ser para el primero, para Esaú Gen. 25:27-34, pero este perdió todo por una satisfacción momentánea.
Contexto de primogenitura, lo que perdió Esaú
Contexto de primogenitura, lo que perdió Esaú
Entre los hebreos, al igual que en otros pueblos de la antigúedad, el primogénito gozaba de muchos privilegios, principalmente en el reparto de la herencia.
Para ello se requería ser el primer hijo de padre y madre que, en una sociedad que practicaba la poligamía, se entendía cronológicamente, pues el primogénito «es la primicia de su vigor» (Dt. 21:15–17). Como tal, tenía derecho a una doble porción de todos los bienes del padre (Dt. 21:17).
La primogenitura involucraba preeminencia y autoridad entre los hermanos, aun en vida del padre (cf. Gn. 27:29; 49:3). Cuanto este moría, el primogénito recibía doble parte de la herencia (Dt. 21:17; 1 Crónicas 5.1-2
Este derecho de primogenitura era considerado como propiedad exclusiva del primer nacido de una familia, incluso si había una segunda esposa preferida a la madre del primogénito. Por lo general, el primogénito heredaba el rango, la situación y las prerrogativas de su padre sobre sus hermanos; venía a ser jefe de la familia o de la tribu.
El derecho de primogenitura podía perderse por propia decisión, p.ej. ser vendido a un hermano menor, como hizo Esaú con Jacob. (Gn. 25:29, 34; Heb. 12:1); también se podía perder por una mala conducta 1Cr. 5:1
Los cristianos también pueden perder su bendición, su primogenitura por tomar malas decisiones
Los cristianos también pueden perder su bendición, su primogenitura por tomar malas decisiones
Leer Gen 25.31-34, NTV
Nueva Traducción Viviente Capítulo 25
31 —Muy bien —respondió Jacob—, pero dame a cambio tus derechos del hijo mayor.
32 —Mira, ¡me estoy muriendo de hambre! —dijo Esaú—. ¿De qué me sirven ahora los derechos del hijo mayor?
33 Pero Jacob dijo:
—Primero tienes que jurar que los derechos del hijo mayor me pertenecen a mí.
Así que Esaú hizo un juramento, mediante el cual vendía todos sus derechos del hijo mayor a su hermano Jacob.
34 Entonces Jacob le dio a Esaú guiso de lentejas y algo de pan. Esaú comió, y luego se levantó y se fue. Así mostró desprecio por sus derechos del hijo mayor.
La herencia por ser el primogénito, fue perdida por causa de su enfoque erróneo. Heb 12:14-17
La herencia por ser el primogénito, fue perdida por causa de su enfoque erróneo. Heb 12:14-17
Esaú perdio sus privilegios por ser un fornicario y un profano
Fornicario: RVR-1960), basada en su preferencia inicial por las esposas paganas Gén. 26:34-35; Gen.28:8-9
Profano: Un Mundano. Esaú no actuó como alguien que contempla la vida desde una perspectiva de largo alcance, mucho menos una perspectiva eterna.
Nosotros también somos los primogénitos de Dios, privilegiados de mayor manera que el pueblo de Israel Hebreos 12: 18-25
Conclusión
Conclusión
La gracia de Dios, o mejor dicho el favor de Dios se puede perder si permitimos que aquellas cosas como la amargura o cualquier pecado, arruine el obtener las bendiciones espirituales que solo Dios puede dar.
En esta temporada de campamento, la paz y la santidad son elementos indispensables para acumular tesoros en el cielo, caso contrario lo que nos espera es solo perdida, como lo fue con Esaú…2 Cor. 5.10