La fe
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· 66 viewsLa fe es fundamental para la vida cristiana pues es el elemento que nos da la certeza de que tenemos comunión con Dios, aun cuando no lo percibamos fisicamente.
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La fe
La fe
Hebreos 11:1–2,6
1 Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. 2 Porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos. 3 Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía.
6 Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.”
Introducción
Introducción
La fe es muy mencionada pero poco entendida.
Hebreos 11 presenta una explicación ilustrativa de la fe.
Comienza en el versículo 10, donde advierte a la iglesia a no ceder al pecado, a mantenernos firme a pesar de las pruebas y tribulación, pues nuestra ancla firme es la fe.
Hebreos 10:39 “Pero nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen fe para preservación del alma.”
Luego el escritor sagrado procede a explicar lo que es la fe.
Del griego pistis que tiene que ver con la fidelidad, confiar en alguien porque es fiel. Gálatas 5:22-23 “Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.”
Certeza
Certeza
La fe es la certeza de lo que se espera.
Para los que tienen casa propia, están seguros de que son dueños porque tienen un titulo de propiedad que los respalda, por lo tanto viven confiados y seguros, sin temor a que nadie los desaloje porque tienen la certeza de que esa es su casa.
En el griego la palabra certeza es = hypostasis, Lo que significa escritura o título de propiedad.
Entonces, la Biblia dice que la fe es el título de propiedad de lo que se espera. En el contexto de Hebreos 11, es tener la seguridad de que Dios cumplirá su promesa de salvación a todos aquellos que creen en Cristo.
Hebreos 11:13–16 (RVR60)
13 Conforme a la fe murieron todos éstos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra. 14 Porque los que esto dicen, claramente dan a entender que buscan una patria; 15 pues si hubiesen estado pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de volver. 16 Pero anhelaban una mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les ha preparado una ciudad.
Convicción
Convicción
La fe es convicción de lo que no se ve.
La convicción es la plena seguridad en lo que uno cree y se mantiene firme en ese pensamiento aun cuando otros le procuren convencer de lo contrario.
Aquí el escritor usa la palabra griega elenchos, que significa = prueba o evidencia convincente.
Las pruebas o evidencias son las que acusan a una persona de un crimen, pues muestran con claridad la verdad.
Para la razón o la lógica las pruebas o evidencias deben ser visibles, pero el escritor sagrado declara que la fe es la convicción de las cosas que no se ven.
Hebreos 11:24–26 (RVR60)
24 Por la fe Moisés, hecho ya grande, rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón, 25 escogiendo antes ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del pecado, 26 teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque tenía puesta la mirada en el galardón.
Naturaleza de la fe
Naturaleza de la fe
Si no es posible ver , cómo podemos creer?, es creer en lo desconocido?
La fe se basa en el conocimiento de Dios y su obra manifestada en la creación: Hebreos 11:3 “Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía.”
La evidencia de lo que no se ve es Dios, no lo vemos a Él pero podemos ver su manifestación en la creación o su revelación general.
Por tanto, los antiguos obtuvieron buen testimonio, fueron aprobados, gozaron de buena reputación, porque creyeron en Dios. Hebreos 11:2 “Porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos.”
Entonces, la fe no es irracional, es fruto del conocimiento de Dios, mientras más le conocemos, más fe se produce en nosotros.
Conocemos a Dios por la Palabra: Romanos 10.17 “Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.” La fe no es ignorancia, es conocer a Dios.
El valor de la fe
El valor de la fe
Hebreos 11:6 “Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.”
La fe es indispensable para alcanzar la salvación, pues debemos creer, y actuar bajo la convicción de que el sacrificio de Cristo nos limpia de todo pecado y nos otorga la salvación. Por es la salvación se aplica a todo el mundo, porque es necesario tener fe en Dios para recibir su regalo.
Nos acercamos a Dios creyendo que no nos rechaza: Salmo 51:17 “Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios.”
Tener fe es creer que el sacrificio de Cristo es suficiente para darnos salvación, seremos salvos, esa es la certeza de lo que se espera. Somos libres de pecado y condenación, convicción de lo que no se ve.
Por tanto recibimos el galardón, el regalo de Dios que es la salvación y la vida eterna.
Conclusión
Conclusión
La fe no es un poder mágico para obtener lo que deseamos, es creer que Dios otorga lo que es mejor para nosotros como un Padre bueno.
Hebreos 11:17–19 (RVR60)
17 Por la fe Abraham, cuando fue probado, ofreció a Isaac; y el que había recibido las promesas ofrecía su unigénito, 18 habiéndosele dicho: En Isaac te será llamada descendencia; 19 pensando que Dios es poderoso para levantar aun de entre los muertos, de donde, en sentido figurado, también le volvió a recibir.
Aun las angustias, son el trato de Dios para nuestro bien.
Por tanto, aquel que tiene fe obedece a la Palabra de Dios, pues está convencido de que le irá bien si se conduce conforme a su ley.
Fe es conocer a Dios, por tanto, vivimos confiados de que las cosas buenas y malas que nos pasan, están dentro del propósito de Dios, así que vivimos tranquilos y felices en esa confianza, sabiendo que vendrán tiempos mejores para nosotros.